Moscú, 4 dic (.).- El producto interior bruto (PIB) de Rusia en 2024 ascenderá al nivel del 3,9 o 4 %, en momentos en que la economía europea atraviesa "tiempos difíciles", afirmó hoy el presidente ruso, Vladímir Putin, durante su intervención en un foro económico organizado por el banco ruso VTB.
"El crecimiento de la economía de Rusia el año pasado fue del 3,6 % y este año estará entre el 3,9 o 4 %", dijo.
Putin señaló que el crecimiento de la economía rusa "incide positivamente en el sistema presupuestario", ya que en los primeros diez meses de este año permitió un superávit consolidado del país y los fondos privados de 2,5 billones de rublos (23.900 millones de dólares).
El mandatario ruso indicó que, tras un período difícil debido a la ruptura de las relaciones económicas con Occidente y las sanciones impuestas por la guerra en Ucrania, "la economía de Rusia no solo se restableció totalmente sino que garantiza la posibilidad de promover cambios estructurales cualitativos.
Estos cambios, señaló, son "el principal resultado de nuestro trabajo en la esfera económica de los últimos dos o tres años".
Al mismo tiempo, señaló que en estos momentos "la economía europea atraviesa tiempos difíciles".
"La ruptura de las relaciones con Rusia juega sin lugar a dudas un papel importante, ya que los alemanes y otros europeos no solo perdieron la posibilidad de recibir hidrocarburos rusos a precios aceptables, sino también por otras circunstancias", dijo.
Entre estas circunstancias citó la imposibilidad de vender las producciones europeas en el mercado ruso, suministrar piezas a las empresas anteriormente creadas por inversores europeos y la imposibilidad de utilizar las rutas logísticas y utilizar las divisas europeas en Rusia.
"Nosotros no expulsamos a nadie, no presionamos a nadie para que se retirara de nuestro mercado", indicó, al constatar que parte de las empresas occidentales se marcharon de Rusia tras el comienzo de la guerra.
Sin embargo, consideró que las compañías que dieron la espalda al mercado ruso no las tendrán fáciles en caso de que sus gobiernos les autoricen el retorno.
"Durante los dos años anteriores muchos nichos que se abrieron tras la marcha de nuestros socios europeos comenzaron a ser ocupados activamente por compañías de otros países", explicó.
Además, aseveró que las compañías rusas llevan a cabo la llamada "sustitución de importaciones" a un ritmo mayor de lo esperado por el Gobierno ruso, con lo que también ocupan los nichos libres.
"¿Crearemos condiciones para los que quieran regresar? No crearemos condiciones especiales. No expulsamos a nadie, no le prohibimos nada a nadie, nuestras puertas están abiertas", dijo, al señalar que tampoco se impondrán obstáculos.