Roma, 21 ene (EFE).- El primer ministro italiano, Matteo Renzi, se ha mostrado hoy a favor de proceder a "fusiones y consolidaciones bancarias" en relación con la situación de los bancos en su país, sometidos a presiones bajistas en la Bolsa en los últimos días.
"La primera solución para los créditos fallidos es hacer relanzar la economía, facilitar que el mercado privado los compre, alentar las asociaciones, fusiones y consolidación bancarias", señala Renzi en una entrevista con el diario Il Sole 24 Ore.
"Creo que el mercado está enviando señales claras y pienso que los accionistas y los directivos interesados saben perfectamente lo que se hace", agrega el primer ministro en relación a la situación bancaria italiana.
Renzi alude también a la creación de un "banco malo" que compre préstamos deteriorados de las entidades y reconoce que se podría "haber hecho antes" mediante un acuerdo con las instituciones de la Unión Europea (UE), pero asegura que el ministro de Economía, Pier Carlo Padoan, "está haciendo milagros".
"En cuestión de algunas semanas todo estará más claro", indica el primer ministro sin dar más precisiones.
Según los últimos datos de la Asociación Bancaria Italiana (ABI) en su informe más reciente los préstamos deteriorados ascendían en noviembre pasado a 201.028 millones de euros.
Renzi reitera que el sistema bancario italiano "es mucho más sólido de lo que legítimamente algunos inversores temen" y critica a quienes "perdieron una gran oportunidad" cuando entre 2011 y 2012 "decidieron abandonar Italia".
"Si hubieran mantenido sus posiciones por ejemplo con títulos del Estado -con aquellos niveles- hoy estarían ganando montones de dinero. Y por el contrario quizás el inversor alemán o el banquero francés compró otra cosa. Y hoy se arrepienten, cómo se arrepienten", agrega Renzi.
"Los eventos de estas horas facilitarán fusiones, asociaciones, adquisiciones. Así funciona el mercado. Verá que habrá un escenario interesante, estoy seguro de ello", añade el primer ministro.
En relación con la situación del banco Monte Paschi di Siena (Mps), que en los primeros tres días de esta semana perdió en la Bolsa de Milán un 40 % de su valor de mercado, Renzi indica que "la solución mejor será la que el mercado decida".
"Me gustaría mucho que fuese italiana, pero quien venga hará un buen negocio", comenta el primer ministro, quien en otro momento de la entrevista, preguntado por sus preferencias en el ámbito de las fusiones bancarias, asegura: "no es mi competencia entrar en esta dinámica".
Sí apunta que será necesario que Italia cuente con "jugadores grandes en algunos sectores: algunos bancos, algunas aseguradoras, multinacionales de la energía, en el sector del automóvil, la agroalimentación. En todos los sectores clave. Las modalidades sin embargo dependen de los accionistas, no del Gobierno".