Atenas, 19 feb (EFE).- La agencia de calificación Standard & Poor's (S&P) afirmó hoy que una salida de Grecia de la eurozona iría muy probablemente acompañada de un impago a sus acreedores, pero apuntó que no sería tan arriesgada para los demás miembros como lo habría sido en 2012.
"Con todo, creemos que un Grexit no supondría un contagio para otros países hacia la salida del euro, porque la arquitectura de rescate es más robusta ahora que en 2012, cuando ya hubo miedo por una posible salida del país de la eurozona", afirmó el analista de S&P Moritz Kraemer.
Desde entonces, señaló la agencia en un comunicado, se ha introducido el Mecanismo de Estabilidad Europeo, que puede dar apoyo financiero a los países de la eurozona bajo la presión de los mercados, tras un hipotético Grexit.
En opinión de S&P, los contactos de Grecia con los mercados financieros se han reducido lo suficiente como para hacer el contagio "menos probable".
La diferencia entre los bonos griegos y los de los demás países de la eurozona también sugiere, para la agencia de calificación, que los inversores consideran que el riesgo de revalorización de esos bonos en el caso de una salida es leve.
Mientras que el interés de los bonos de deuda griega han aumentado en los últimos meses por la incertidumbre en las relaciones entre el país heleno y sus acreedores, los de Italia, Irlanda, Portugal y España han registrado sus valores más bajos.
"Creemos que la carga financiera de un Grexit para los demás países de la eurozona sería moderada y absorbida en algunas décadas, por lo que no esperamos que la salida del país de la eurozona, por si misma, tenga implicaciones relevantes en la valoración de estos países", afirmó Kraemer.