Barcelona, 17 jul (.).- CaixaBank (BME:CABK) Research, el servicio de análisis de CaixaBank, ha revisado al alza la previsión del precio de la vivienda en España, pese a que ha apuntado un retroceso de las compraventas y la ralentización del incremento de los precios, ya que pasarán del 5 % de 2022 al 2,9 % y al 1,1 % en 2023 y 2024, respectivamente.
El mercado inmobiliario empezó a desacelerarse a mediados de 2022 con la subida de los tipos de interés por parte del BCE y, de cara a los próximos trimestres, CaixaBank Research prevé un importante ajuste en el número de compraventas respecto a los elevados registros de 2022.
El número de compraventas de vivienda registró la primera tasa de variación interanual negativa en diciembre de 2022, con un -10,2 %, y, exceptuando el mes de enero, ha seguido siendo negativa hasta el mes de abril.
Según el estudio , el segundo semestre será "clave" para evaluar el grado de resistencia del sector ante el fuerte incremento de los tipos de interés y el debilitamiento de la economía.
Así, entre los factores positivos el estudio destaca el mercado laboral resiliente e incrementos salariales más vigorosos, el descenso de la inflación, significativos flujos de inmigración y una situación financiera favorable de los hogares y del sector financiero.
Por otra parte, apunta un descenso destacado de las compraventas, pero con un impacto moderado en los precios; la oferta de la vivienda nueva seguirá siendo inferior a la creación neta de hogares; y los costes de construcción tendrán una trayectoria descendente, aunque seguirán por encima del nivel prepandemia.
Los datos que se han ido conociendo en el primer semestre del año han sido "mejores" que lo que anticipaba la entidad, lo que le ha llevado a revisar al alza no sólo la previsión del precio de la vivienda, sino también el número de compraventas hasta las 500.000 en el conjunto de este año, una cifra similar a la de 2019 pero un 23 % inferior a la de 2022.
CaixaBank Research mantiene las previsiones del número de visados de obra nueva, unas 90.000 viviendas, ya que los datos siguen siendo bastante "débiles" y los altos costes de construcción junto con la escasez de mano de obra no hacen prever una mayor actividad a corto plazo.
La entidad considera que el número de visados de obra nueva sigue siendo muy inferior al de la creación neta de hogares.