El Cairo, 5 ene (.).- Una caída en déficit comercial del 12,9 % y el crecimiento sostenido de los ingresos en el sector servicios como los generados por el Canal de Suez y turismo han permitido a Egipto mantener un leve superávit de 228,8 millones de dólares en su balanza de pagos en el primer trimestre del año fiscal () de 2023.
Así lo informó el Banco Central de Egipto en una nota en la que se señaló, sin embargo, que este superávit fue sensiblemente menor a los 523,5 millones de dólares que se registraron en el mismo período del año anterior.
En el año fiscal , el superávit de Egipto fue de 882,4 millones de dólares.
Estas cifras son el resultado de una mejora en el déficit por cuenta corriente, fundamentalmente en el déficit comercial, que recortó 2.400 millones de dólares (un 12,9 %) respecto a los registros del año anterior, hasta - 6.600 millones de dólares.
El grueso de estos números corresponden a la caída del 12,5 % en las importaciones de bienes comerciales no petroleros, como granos, plásticos (incluidos los vinculados a la industria automotriz) y compuestos orgánicos e inorgánicos.
Las exportaciones se incrementaron en 458,9 millones de dólares, hasta 6.700 millones de dólares, impulsadas por las ventas de vegetales, cables, oro y electrodomésticos.
Los ingresos por servicios como el transporte crecieron un 13,5 %, hasta 3.500 miles de millones de dólares, gracias al incremento de los pagos en el Canal de Suez, que registró incrementos de tránsito tanto por tonelaje como buques en tránsito.
También crecieron los ingresos por turismo, un 9,3 % hasta 4.500 miles de millones de dólares, ya que el país recibió más turistas (un 23,2 %), que pernoctaron más (+9,3 %).
Esos números compensaron una notable caída en las exportaciones de petróleo, un sector en el que la balanza de pagos amplió su déficit en 106 millones de dólares.
Egipto, un país tradicionalmente exportador de hidrocarburos (gas y petróleo), rebajó sus exportaciones de gas natural en 2.000 millones de dólares respecto al primer trimestre fiscal del año anterior, tanto por el volumen exportado como por la caída en los precios internacionales.
Pese a que el país importó también mucho menos crudo (937 millones de dólares menos), el resultado energético ha marcado mucho el resultado de la balanza comercial.
Otra cifra en negativo fueron los envíos de remesas de los trabajadores egipcios en el exterior, que cayeron un 29,9 %, y registraron tan solo 4.500 millones de dólares frente a los 6.400 millones del año anterior.
Dada la pérdida de valor de la moneda egipcia desde 2022 y la inestabilidad económica, las remesas han dejado de llegar al país ante la inminencia de una nueva devaluación.
La inversión extranjera directa, incluido el sector del petróleo, alcanzó los 1.800 millones de dólares netos, frente a los 4.400 millones que se registraron en el año anterior.
Ese resultado se produjo entre otros motivos por que los ingresos por las privatizaciones llevadas a cabo por el Estado permitieron el ingreso de apenas 15,4 millones de dólares frente a los 1.000 millones del año anterior.