Moscú, 1 feb (.).- El PIB de Rusia se contrajo un 3,1 % en 2020 al calor de la pandemia del coronavirus, lo que supone una evolución mejor de lo previsto por las autoridades, pero que aun así representa el peor dato en once años, según el cálculo preliminar publicado hoy por la agencia rusa de estadística, Rosstat.
Desde 2015, cuando la economía rusa se contrajo un 2 %, el PIB no se había vuelto a teñir de rojo.
El registro del año pasado es el peor desde 2009, cuando el país sufrió un retroceso del PIB del 7,8 %, de acuerdo con la base de datos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Rusia entró en recesión técnica en el tercer trimestre del año pasado tras registrar su PIB una contracción del 3,4 %, después de la caída del 8 % que sufrió entre abril y junio.
Rosstat aún no ha publicado el dato relativo al cuarto trimestre, que suele difundir solo a finales de marzo o principios de abril.
La contracción en 2020 está asociada con las medidas restrictivas implantadas por Rusia durante la primera ola de la pandemia del coronavirus y una caída en la demanda global de fuentes energéticas de las que depende tanto el país.
La evolución de la actividad económica el año pasado ha sido no obstante mejor de lo previsto tanto por el Gobierno (una caída del 3,8 % ó 3,9 %) como por el Banco Central (del 4 % al 5 %) y el FMI (un 4,1 %).
Para este ejercicio el Gobierno prevé un aumento del PIB del 3,3 %, para 2022 del 3,4 % y para 2023 del 3 %.
El presidente ruso, Vladímir Putin, indicó en diciembre que la economía rusa recuperará el nivel previo a la pandemia a fines de 2021 o el primer trimestre de 2022, aunque advirtió de que la salida de la crisis dependerá del éxito de la lucha contra el coronavirus.