Barcelona, 16 jun (.).- España y la Unión Europea necesitan un marco jurídico, que "ya va tarde", que regule los criptoactivos para "dar confianza" a los inversores y consolidar un mercado en el que puedan entrar actores institucionales que ahora, sin un "respaldo" claro detrás, optan por mantenerse al margen.
Es una de las principales conclusiones de una mesa redonda ("El reto regulatorio de los criptoactivos") organizada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en la que empresarios del sector, abogados y académicos han dado su punto de vista sobre la cuestión.
El debate se ha enmarcado en la jornada "Regulación e impulso a la innovación en los mercados de valores", a la que han dado el pistoletazo de salida la vicepresidenta de la CNMV, Montserrat Martínez, y el conseller de Economía y Hacienda, Jaume Giró.
REGULAR PARA INCENTIVAR LA INNOVACIÓN
Martínez ha llamado a "extremar las cautelas" mientras no exista una regulación en España: "Hace tiempo que alertamos del riesgo de estos productos y de su carácter especulativo. Se dan algunas prácticas de inversión propias de casino", ha dicho en un contexto en el que las criptomonedas más usadas han mostrado su volatilidad con desplomes sin precedentes.
La CNMV sí controla desde marzo la publicidad asociada a este tecnología y, a este respecto, Martínez ha reclamado a los 'influencers' que se prestan a asociar su imagen a estos productos que "lo hagan de forma responsable y alertando de los riesgos de estos activos", puesto que la mayor parte de los usuarios potenciales, además, son jóvenes.
"Estamos en un momento fascinante, donde la tecnología puede ser un cambio sustancial en los mercados de valores, con beneficios muy importantes para los inversores y el conjunto de la sociedad. Pero debemos controlar que se haga de forma ordenada, por disruptivo que sea", ha resuelto Martínez.
Giró ha defendido que es necesaria una regulación "que delimite el terreno de juego desde el cual es posible la innovación", porque "un marco regulatorio bien diseñado no es un obstáculo, sino un incentivo para la innovación".
Ha alertado de que productos como las criptomonedas son, tal y como se están usando, "un activo extremadamente volátil" al existir "una desconexión completa entre el mercado de las criptomonedas y la economía real".
EL SECTOR AVISA: "YA VAMOS TARDE"
En la mesa redonda han tomado la palabra Joaquim Matinero, abogado del despacho Roca Junyent; el responsable de Bitpanda en España, Alejandro Zala; el abogado de Real Fund Enrique Aznar; el responsable de tecnología de Caelum Labs, Alex Puig; y la profesora de Barcelona School of Management (UPF) Luz Parrondo.
El hilo conductor ha sido el borrador del primer reglamento sobre la materia elaborado por la Comisión Europea, el Markets in Crypto Assets (Mica), que prevé dar capacidad regulatoria a organismos estatales como la CNMV, si bien dentro de un marco común europeo.
"Hasta que no esté en vigor los inversores institucionales no van a dar el salto a los criptoactivos. Ya va tarde, cada día que no está aquí es un perjuicio para todos", ha lamentado Zala en referencia a los trámites por los que debe pasar el texto antes de ser realidad.
Puig ha añadido que "un año en el mundo real son como 5 en el mundo de la cadena de bloques" y ha avisado de que "muchas empresas emergentes se están yendo de Europa" porque no creen que el viejo continente sea el sitio adecuado para hacer negocios.
"Intentemos ser ágiles y legislar cómo podamos, pero hablar de 2025 no tiene sentido", ha agregado Aznar, quien ha pedido a los agentes del sector que, mientras llegue esta regulación, actúen a partir de "una ética del rigor".
Parrondo ha sostenido que estas nuevas tecnologías pueden ser muy útiles para las pymes en un futuro, pues minimizan la intermediación de entidades financieras y agilizan trámites, al tiempo que ha alertado de que algunas empresas emergentes del sector "ganan dinero y no llevan cuentas contables", lo que les generará problemas tributarios en el corto plazo.
Matinero ha dicho que las "finanzas descentralizadas" que permite este conjunto de tecnología va a representar un "cambio de paradigma": "Hay ciertos riesgos, hay que encontrar el punto justo entre la innovación y la regulación", ha afirmado.
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