Sevilla, 8 mar (.).- El presidente de CaixaBank (MC:CABK), José Ignacio Goirigolzarri, ha subrayado este martes que España es un país de pequeñas y medianas empresas y ha defendido que los fondos europeos para hacer frente a la pandemia deben llegar a éstas, un proceso en el que la banca "puede jugar un papel muy importante".
"Se necesita una gran capilaridad y la banca puede jugar un papel muy importante, tenemos esa capacidad para saber discernir entre las empresas que son sostenibles y las que no", ha señalado durante un coloquio en Sevilla organizado por el diario Abc.
Para el presidente de CaixaBank, los fondos europeos Next (LON:NXT) Generation suponen una "oportunidad histórica" que hay que utilizar para "enfrentarnos a las debilidades de la economía española".
Ha señalado, en este sentido, que los fondos europeos de recuperación destinados a España, unos 70.000 millones de euros en total, están "muy bien, pero la mejora de la productividad no se soluciona con eso, sino con reformas".
En este punto, ha apuntado que no le parece importante que los fondos se materialicen de una forma "más o menos rápida", sino con una visión estratégica de medio plazo.
"Hay que hacerlo con una visión transformadora y, si eso requiere más tiempo, estupendo", ha remachado.
También ha incidido en la "transparencia" de resultados porque invertir más de 70.000 millones de euros es "muy difícil".
Por ello, ha insistido en que no le parece malo que se esté retrasando la aplicación de los fondos europeos: "Estamos al comienzo del partido, mejor hacerlo bien que rápido", ha apostillado.
Sobre la próxima reunión del Banco Central Europeo (BCE), en la que se prevé una revisión del cuadro macroeconómico de Europa, ha augurado que va a provocar una "decepción" porque la irrupción de la guerra de Ucrania condiciona los planes previstos.
"Se dijo que este año se iba a dejar de comprar deuda y a subir los tipos de interés, pero aparece lo de Ucrania y nos vamos a ver decepcionados", ha apuntado.
Así, ha indicado que la subida de tipos de interés se va a producir pero "con un retraso de tres o cuatro meses" y podría llegar al 1,5 por ciento.
Según Goirigolzarri, se producirá un cambio en la política monetaria desde el punto de vista cualitativo, pero las subidas serán "muy discretas" desde un punto de vista cuantitativo.
Sobre el impacto en la economía de la guerra de Ucrania, ha dicho que va a depender de lo que dure el conflicto y que, en todo caso, la mayor afectación será en el coste de la energía y no tanto en los corredores comerciales porque las exportaciones españolas a Rusia no llegan al 1 por ciento.
En cuanto a los posibles efectos de esta guerra en la construcción europea, ha vaticinado un "replanteamiento de Europa muy importante", especialmente en el ámbito de la seguridad.
En cuanto a las discrepancias en el seno del Gobierno de coalición por el envío de armas a Ucrania, ha dicho que le preocupa la "polarización" de posiciones políticas en España y la "crispación", que "ni crea puestos de trabajo ni salva vidas".
El presidente de CaixaBank ha hablado también de la reforma laboral y, aunque ha admitido que el acuerdo al que se llegó no era, "probablemente", lo que a él le hubiese gustado, ha defendido que tiene la "gran virtud" de haber puesto a todos los agentes sociales "en una misma línea".
"Fue un avance para la estabilidad, que es fundamental para el desarrollo económico", ha sentenciado.