Sao Paulo, 1 sep (.).- La economía brasileña retrocedió un 0,1 % en el segundo trimestre frente a los tres primeros meses del año, cuando el PIB avanzó un 1,2 %, lo que indica estabilidad y una desaceleración en la recuperación del país, informó este miércoles el Gobierno.
En la comparación con el primer trimestre de 2020, el producto interior bruto (PIB) de la mayor economía de Sudamérica creció un 12,4 %, según los datos publicados por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE).
El resultado económico registrado entre abril y junio vino en línea con las expectativas de los analistas y, pese a la desaceleración, refuerza las proyecciones de que Brasil podrá crecer hasta un 5,2 % en 2021 y dejar atrás la profunda recesión provocada por la covid en 2020, cuando la economía se desplomó un 4,1 %.
De acuerdo con el IBGE, en el primer semestre el PIB brasileño acumula un alza del 6,4 % respecto al mismo periodo del año anterior.
El resultado del segundo trimestre se vio fuertemente influido por el sector agropecuario, cuya producción bajó un 2,8 % frente a los tres meses anteriores, y el industrial, que retrocedió un 0,2 %.
En sentido inverso, el sector de servicios avanzó un 0,7 %, con subidas en todas las actividades, impulsadas por la ralentización de la pandemia y consiguiente reapertura económica en prácticamente todo el país.
En la comparación con el primer trimestre de 2020, el fuerte crecimiento de 12,4 % fue impulsado sobre todo por la industria, que avanzó un 17,8 %, el sector agropecuario, que aumentó 1,3 % y el de servicios, con un avance del 10,8 %.
Asimismo, según el Gobierno, mientras que el consumo de las familias no presentó variaciones en el segundo trimestre, por los efectos de la pandemia, la formación bruta de capital fijo (inversión productiva) retrocedió un 3,6 % en la comparación con los tres primeros meses del año.
La balanza comercial brasileña creció un 9,4 % en las exportaciones de bienes y servicios, la mayor variación registrada desde el primer trimestre de 2020, en tanto que las importaciones se redujeron un 0,6 % en comparación con el primer trimestre.
La tasa de inversión en Brasil en el segundo trimestre fue equivalente al 18,2 % del PIB, por encima de los mismos meses del año pasado (15,1 %).