Nueva Delhi, 20 mar (.).- El secretario de Asuntos Económicos de la India, Ajay Seth, defendió este lunes la solidez del sistema bancario indio y destacó su capacidad para evitar cualquier impacto procedente del colapso de varios bancos estadounidenses o de la crisis del gigante helvético Credit Suisse (SIX:CSGN), que ha sacudido los mercados globales.
"Los fundamentos macroeconómicos de la India siguen siendo sólidos y el país se encuentra sobre una base sólida para absorber cualquier impacto externo de este tipo", dijo Seth en una entrevista al medio indio 'The Economic Times'.
El funcionario destacó la "buena forma" que atraviesan los bancos de la India en un momento en que impera la incertidumbre global, tras el colapso de los bancos estadounidenses Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank hace dos semanas, y sostuvo que las instituciones indias no atraviesan problemas similares.
A pesar de que el Gobierno estadounidense se apresuró a garantizar los depósitos de todos los clientes en un intento por frenar el efecto contagio que originó la crisis de 2008, a este panorama incierto se sumó la semana pasada la dura caída en bolsa del gigante helvético Credit Suisse, que acordó este lunes su absorción por su tradicional rival, UBS (SIX:UBSG).
En este contexto de enorme desconfianza, y con el fantasma de una crisis bancaria, Seth sostuvo que el Gobierno está monitorizando la situación con la ayuda de reguladores claves, como el Banco de la Reserva de la India (RBI) y la Junta de Bolsa y Valores de la India, para evitar que este país asiático se contagie del derrumbe financiero.
Estas declaraciones de Seth se suman al discurso pronunciado la semana pasada por el gobernador del RBI, Shaktikanta Das, durante un foro económico en el sur de la India, donde resaltó la estabilidad del sector financiero indio en medio de la incertidumbre global.
La economía de la India creció un 4,4 % en su tercer trimestre fiscal (de octubre a diciembre pasados), y el Gobierno indio espera registrar un crecimiento del producto interior bruto (PIB) del 7 % para este año fiscal, impulsado por el consumo privado y la inversión, en comparación con el 9,1 % en el año fiscal 2021-2022.
No obstante, el país asiático registró un 6,44 % de inflación el pasado febrero, todavía por encima del rango máximo de tolerancia de entre el 2 y el 6 % que se marcaron las autoridades para el final de este año fiscal, que concluye este mes.