Por Roberto Samora y Marcelo Teixeira
SAO PAULO/NUEVA YORK, 13 sep (Reuters) - La medida del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, de recortar fuertemente los impuestos a los combustibles, en particular a la gasolina, para impulsar sus posibilidades de reelección, ha reducido los márgenes de ganancia del etanol y se espera que lleve a los ingenios a evitar el biocombustible y a centrarse fuertemente en el azúcar.
Los expertos en azúcar y etanol dijeron que los beneficios de las ventas de etanol a base de caña de azúcar han caído tanto en comparación con los del azúcar que los ingenios brasileños, que tienen flexibilidad para hacer más de uno u otro, cambiarán todo lo posible a la producción de azúcar cuando la cosecha entre en la segunda mitad.
"Los ingenios ya tienen pérdidas por la venta de etanol, ¿por qué iban a seguir produciéndolo?", dijo el analista brasileño Julio Maria Borges, de JOB Economia.
El riesgo para los productores de azúcar de todo el mundo es que los precios del edulcorante podrían bajar si los ingenios brasileños reducen drásticamente la producción de etanol, lo que aumentaría la oferta mundial de azúcar.
El gobierno brasileño ha cancelado temporalmente los impuestos federales sobre los combustibles. Dado que la gasolina solía estar más gravada que el etanol, la supresión de los impuestos disminuyó la ventaja del precio del etanol en los surtidores.
Los fabricantes brasileños de azúcar y etanol comprueban constantemente la llamada paridad del etanol, o el rendimiento financiero del biocombustible equivalente a los precios del azúcar crudo en la bolsa ICE, para decidir la estrategia de producción.
"La paridad del etanol ya está en 13,70 (centavos de dólar por libra), ¿qué más daño se puede hacer?", dijo Michael McDougall, director gerente del corredor Paragon Global Markets, LLC, con sede en Nueva York.
A modo de comparación, los futuros del azúcar en ICE cerraron el lunes a 18,35 centavos por libra, casi un 35% más que el valor del etanol en Brasil.
Sin embargo, hay limitaciones en este momento para trasladar demasiada producción al azúcar debido a la época de máxima cosecha, dice Claudiu Covrig, de CovrigAnalytics.
Para hacer frente a los elevados volúmenes de trituración de caña en la actualidad, las fábricas siguen necesitando utilizar parte de sus instalaciones de etanol.
Covrig cree que el paso al azúcar se producirá gradualmente, a medida que los volúmenes de trituración se vayan reduciendo de cara a los últimos meses de la temporada.
Según los datos del grupo industrial UNICA, la mayor asignación de caña para el azúcar fue del 49,7% en 2006, y la menor del 34,3% en 2019. A mediados de agosto, la mezcla de azúcar estaba en el 44,7%.
Una encuesta publicada el viernes mostró que Bolsonaro probablemente perdería una segunda vuelta electoral contra su oponente de izquierda Luiz Inacio Lula da Silva en las elecciones de octubre.
(Reporte de Roberto Samora y Marcelo Teixeira; Editado en Español por Ricardo Figueroa)