Los responsables de la Reserva Federal, Thomas Barkin y Raphael Bostic, han expresado su preocupación por la posibilidad de que se produzca una desaceleración económica en Estados Unidos, a pesar de los recientes y sólidos datos de crecimiento. Sus comentarios, realizados en una charla informal celebrada el jueves en Nueva Orleans, apuntan a que la economía podría no haber absorbido totalmente el impacto de las anteriores subidas de tipos.
Bostic, conocido por su postura política "dovish" y presidente de la Fed de Atlanta, declaró que cree que la actual política de la Reserva Federal es suficientemente restrictiva para frenar la inflación. Advirtió de una inminente inestabilidad económica, pero se comprometió a mantener esta postura hasta que la inflación alcance el objetivo del 2%.
Por otra parte, el Presidente de la Fed de Richmond, Thomas Barkin, conocido por sus opiniones de halcón, predijo una recesión económica. La previsión de Barkin contradice los recientes datos de fuerte crecimiento del tercer trimestre. Sostuvo que una ralentización es necesaria para demostrar a los responsables de la fijación de precios su influencia cada vez menor en los precios.
Estas observaciones se producen en un momento en que la Reserva Federal contempla nuevas subidas de los tipos de interés, a pesar de que se encuentran en su nivel más alto en 22 años, entre el 5,25% y el 5,5%. Esta contemplación va en contra de las expectativas de los inversores del mercado, que prevén que no habrá más subidas.
Hoy más tarde, el sector financiero espera con interés el discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, en una conferencia del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington. El discurso podría proporcionar más información sobre la futura dirección de la política monetaria de la Reserva Federal en medio de estos puntos de vista divergentes de sus funcionarios.
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