TÚNEZ, 25 sep (Reuters) - Cientos de tunecinos protestaron el domingo por la noche en la capital contra la pobreza, los altos precios y la escasez de algunos alimentos, aumentando la presión sobre el gobierno del presidente Kais Saied, mientras el país sufre una crisis económica y política.
Túnez se esfuerza por reactivar sus finanzas públicas mientras crece el descontento por la inflación, que roza el 9%, y la escasez de muchos alimentos en las tiendas porque el país no puede pagar algunas importaciones.
La nación norteafricana también se encuentra inmersa en una grave crisis política desde que Saied se hizo con el control del poder ejecutivo el año pasado y disolvió el Parlamento en una medida que sus opositores calificaron de golpe de Estado.
En el barrio pobre de Douar Hicher, en la capital, algunos manifestantes levantaron panes al aire. Otros coreaban "¿Dónde está Kais Saied?". Jóvenes enfadados quemaron neumáticos.
En el suburbio de Mornag, unos jóvenes bloquearon las calles, en protesta por el suicidio de un joven que, según su familia, se ahorcó después de que la policía municipal lo acosó y le confiscó una báscula cuando vendía fruta en la calle sin permiso.
La policía antidisturbios disparó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes en Mornag. Los manifestantes gritaron eslóganes contra la policía y piedras.
En Douar Hicher, los manifestantes corearon "Empleo, libertad y dignidad nacional", y "No podemos soportar las locas subidas de precios", "¿Dónde está el azúcar?".
La escasez de alimentos se agrava en Túnez, con estantes vacíos en supermercados y panaderías, lo que se suma al descontento de muchos tunecinos por los altos precios y tener que pasar horas buscando azúcar, leche, mantequilla, aceite de cocina y arroz.
Videos en las redes sociales mostraban el domingo a decenas de clientes luchando por conseguir un kilo de azúcar en el mercado.
Túnez, que sufre su peor crisis financiera, está tratando de conseguir un préstamo del Fondo Monetario Internacional para salvar las finanzas públicas del colapso.
El gobierno subió este mes el precio de las bombonas de gas para cocinar en un 14% por primera vez en 12 años. También subió los precios de los combustibles por cuarta vez este año, como parte de un plan para reducir los subsidios a la energía, un cambio de política solicitado por el FMI.
(Reporte de Tarek Amara; Editado en Español por Ricardo Figueroa)