Por Alun John y Harry Robertson
LONDRES, 24 oct (Reuters) - Los inversores dieron la bienvenida el lunes a Rishi Sunak como nuevo primer ministro británico, pero es probable que le den poco margen para desviarse de la contención del gasto y el alza de impuestos, luego de que su predecesora hiciera tambalear su fe en la gestión de la economía por parte del Partido Conservador.
Sunak se convertirá en el próximo líder de Gran Bretaña -y el tercero en dos meses- después de que venciera al ex primer ministro Boris Johnson y a la legisladora Penny Mordaunt en la carrera por la jefatura del gobernante Partido Conservador.
Los mercados de deuda pública parecieron acoger con satisfacción el ascenso de Sunak, y el rendimiento del bono de referencia a 10 años bajó 30 puntos básicos hasta el 3,75% el lunes.
El mes y medio en el poder de la primera ministra saliente, Liz Truss, provocó el caos en los mercados financieros.
Los planes de su ministro de finanzas, Kwasi Kwarteng, de realizar enormes recortes fiscales sin financiamiento provocaron un salto en los rendimientos de los gilts que sacudió el sistema de pensiones del país, obligando al Banco de Inglaterra a intervenir.
Paul Donovan, economista jefe de UBS (SIX:UBSG) Wealth Management, dijo que la caída de los rendimientos de los gilts en los últimos días mostraba que los mercados ya no cobraban al Reino Unido esa "prima de riesgo de credibilidad".
Sin embargo, Donovan dijo que el caos del último mes significa que Sunak no tendrá casi ningún margen para tomar decisiones audaces, para no arriesgarse a la ira del mercado.
La libra se ha recuperado con fuerza tras alcanzar un mínimo histórico de 1,0327 dólares tras el anuncio del presupuesto de Kwarteng. El lunes cotizaba en 1,1283 dólares. Ha perdido un 17% de valor este año frente al dólar y un 4% frente al euro.
Los analistas afirman que el gobierno británico todavía tiene mucho trabajo que hacer antes de que los inversores se sientan seguros de volver al Reino Unido.
Para recuperar la credibilidad ante los mercados se necesitaría una combinación de subidas de impuestos y una contención del gasto políticamente realista, dijo Michael Michaelides, analista de renta fija de la gestora de activos Carmignac, con sede en París.
Si el Gobierno pretende mantener la ayuda a los consumidores con los precios del gas u ofrecer recortes fiscales, "hay que costearlos totalmente, con un plan para pagarlos en un plazo rápido", añadió.
No será fácil ya que la alta inflación hace que los presupuestos del gobierno, desde la sanidad hasta la defensa, se vean reducidos. El Banco de Inglaterra prevé una recesión para finales de año y Sunak lidera ahora un partido con gusto por deshacerse de sus dirigentes.
(Reportaje de Alun John y Harry Robertson; Editado en español por Juana Casas)