Washington, 2 ago (EFE).- La petrolera BP tuvo que retrasar hoy
por un problema técnico las últimas pruebas para determinar si
procede al sellado definitivo del pozo averiado en el Golfo de
México mediante una inyección de lodo pesado a través de la cabeza
del manantial.
En un breve comunicado, BP explicó que "durante las preparaciones
para comenzar con las pruebas de inyección se ha descubierto una
pequeña fuga hidráulica" en uno de los sistemas de control.
La multinacional calcula, no obstante, que podrá llevar a cabo
las pruebas el martes, al igual que la operación de sellado
denominada "static kill" (eliminación estática).
Esta operación busca, mediante la inyección de cemento y lodo
pesado, empujar el petróleo hacia su lugar original, un depósito
situado a 4.000 metros bajo la superficie marina.
Thad Allen, el almirante retirado que dirige la respuesta del
Gobierno al vertido de crudo en el Golfo de México, indicó que las
pruebas durarían unas cuatro horas y dependiendo de los resultados
comenzaría el "static kill".
Se prevé que ese procedimiento que se realizará desde la boca del
pozo averiado, llamado "Macondo", se prolongue entre 33 y 61 horas,
según Allen.
Para asegurar que el pozo queda definitivamente cerrado, la firma
responsable del que es considerado el peor desastre ecológico en la
historia de EE.UU. procederá a continuación a clausurar también el
pozo en la parte inferior, mediante un procedimiento bautizado como
"bottom kill" (eliminación desde el fondo).
Esa operación se llevará a cabo a través del pozo auxiliar que
excava BP.
Kent Wells, vicepresidente ejecutivo de BP, dijo hoy a los medios
que esperaban que, de no haber contratiempos, toda la operación
debería estar finalizada entre el 11 y el 15 de este mes.
Según cálculos de científicos difundidos hoy por EE.UU., el pozo
de petróleo averiado en el Golfo de México ha vertido
aproximadamente 4,9 millones de barriles de crudo al mar desde que
explotó y se hundió una plataforma de BP a finales de abril.
BP ya había probado en mayo, sin éxito, inyectar una mezcla de
cemento y lodo pesado para sellar el pozo averiado.
La diferencia con este nuevo intento similar es que ahora BP
cuenta con una campana de contención sobre el pozo que por el
momento lo mantiene cerrado y que permitiría a los equipos inyectar
la mezcla a baja presión y a baja velocidad con mayores
probabilidades de éxito desde la superficie.
Allen señaló hoy en rueda de prensa telefónica que tienen
previsto desplazar a la zona 22 grandes embarcaciones que se
encargarían de extraer el petróleo del mar si hubiese alguna fuga
durante la operación de sellado. EFE