París, 21 abr (EFE).- El constructor europeo de aviones Airbus
indicó hoy que junto a otros fabricantes aeronáuticos y varias
aerolíneas va a seguir evaluando el impacto de las cenizas
volcánicas que desde el jueves de la semana pasada habían conducido
al cierre de muchos aeropuertos en Europa.
Airbus explicó en un comunicado que junto a sus proveedores de
motores, otros constructores aeronáuticos y un cierto número de
aerolíneas que explotan sus aparatos van a continuar realizando
pruebas y controlando las aeronaves que están operando.
La principal filial de EADS se felicitó de la reacción de la
industria de la aviación frente a los retos que le ha planteado la
nube de ceniza por la erupción del volcán islandés.
"Esas amplias discusiones de la industria han conducido a una
evaluación común de los datos y a una definición concertada de
niveles de tolerancia aceptables" para el funcionamiento de los
motores.
Añadió que "gracias al esfuerzo colectivo de la industria, se
encontró tan pronto como fue posible una forma segura de reanudar
los vuelos".
A ese respecto, recordó que el lunes dos de sus aviones (un A380
y un A340-600) realizaron sendos vuelos de pruebas de varias horas
sobre los espacios aéreos de Francia y Alemania sin que la
tripulación detectara nada anormal, y sin que la inspección
posterior de los aparatos mostraran irregularidades.
El presidente de EADS, Louis Gallois, subrayó que "los vuelos de
prueba han demostrado que se puede volar, y por eso se está
volviendo a volar", en un acto en París organizado por la Asociación
de Periodistas Económicos y Financieros (AJEF).
Preguntado por una posible adaptación de las aeronaves para
evitar los problemas generados por la absorción de cenizas
volcánicas que pueden dañar el funcionamiento de los motores,
Gallois recordó que el principio de funcionamiento de los reactores
es que absorben aire, y que ese principio tecnológico difícilmente
puede modificarse. EFE