Castries, 14 ago (EFE).- El Gobierno de la isla caribeña de
Antigua y Barbuda recibirá 50 millones de dólares de la ALBA para
superar su déficit fiscal y pagar el salario que adeuda a cientos de
funcionarios públicos, informó hoy una fuente oficial.
El primer ministro del país antillano, Baldwin Spencer, explicó
que esta inyección de dinero se produce después una petición de
ayuda cursada por su Ejecutivo a la Alternativa Bolivariana para las
Américas (ALBA), impulsada por Venezuela.
"El presidente venezolano, Hugo Chávez, ha firmado los documentos
que permiten la inmediata transferencia de los 50 millones de
dólares a la cuenta del Gobierno en el Banco Central del Caribe
Oriental", indicó Spencer.
El Gobierno antiguano anticipó que la mitad de los fondos son
considerados como un subsidio y el resto un préstamo con condiciones
de pago muy favorables.
Una delegación de la isla caribeña viajará a Caracas para
negociar los términos de la ayuda económica.
El ministro de Economía y Finanzas de Antigua y Barbuda, Harold
Lovell, señaló que su Ejecutivo ya ha determinado en qué partidas
van a ser distribuidos los fondos concedidos por la ALBA.
Explicó que este dinero servirá para cerrar la brecha fiscal en
el presupuesto de 2009 y poner en marcha algún tipo de plan de
estímulo económico, así como para "mejorar el control de gastos y
proporcionar alguna protección social a los pobres y desempleados".
De los 50 millones de dólares, 35 millones se destinarán a apoyar
al presupuesto estatal, una ayuda que permitirá al Gobierno cubrir
sus obligaciones financieras básicas, incluido el pago de salarios y
gastos diarios.
Lovell indicó que otros siete millones se asignarán a planes de
estímulo económico y a proyectos de construcción, con especial
énfasis en la renovación y rehabilitación de edificios del Gobierno,
algo que debería estimular la creación de empleo.
Entre los proyectos gubernamentales figura también el aumento de
los ingresos de los funcionarios de la administración y la
adquisición de una propiedad para albergar el Departamento de
Impuestos Internos (IRD), que podría estar operativo en octubre
próximo. EFE