París, 29 sep (EFE).- BNP Paribas anunció hoy el lanzamiento de
una ampliación de capital de 4.300 millones de euros para devolver
las ayudas públicas que había recibido del Estado francés, como los
otros bancos del país.
BNP Paribas indicó en un comunicado que el reembolso de los 5.100
millones de euros recibidos del Estado, a lo que se añadirán 226
millones a cuenta del interés, se producirá a partir del mes
próximo.
La entidad financiera consideró que la situación actual y sus
buenos resultados hacen innecesario mantener ese préstamo.
Para financiar la devolución del dinero recibido, BNP Paribas
cuenta con los 4.300 millones de euros de esta nueva ampliación de
capital, pero también con el contingente de fondos propios que se ha
reconstituido en los últimos tiempos otra operación similar dedicada
exclusivamente a sus empleados y los dividendos de acciones.
El banco señaló que al término de la operación dispondrá de
59.400 millones de euros de fondos propios y que con los beneficios
obtenidos en el primer semestre dispone de "márgenes de maniobra
financieros adaptados para continuar su desarrollo en un contexto de
exigencias reforzadas de capital".
Según el esquema fijado por el Gobierno francés y la Unión
Europea, los préstamos a los bancos para reforzar sus fondos propios
y hacer frente a la crisis financiera debían ser reembolsados tan
pronto como fuera posible.
Además, se había fijado un mecanismo de tipo de interés
creciente, lo que aumentaba el interés por un reembolso rápido.
BNP Paribas, que estableció provisiones de 4.170 millones de
euros en sus cuentas en el primer semestre, tuvo en esa primera
parte del año 3.160 millones de beneficios.
Por otro lado, la entidad financiera anunció ayer que va a cerrar
media docena de filiales en países o territorios que figuran en las
conocidas como "listas grises" de paraísos fiscales de la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Se sabe que eso afectará al menos a entidades domiciliadas en
Bahamas, Panamá, Costa Rica y Uruguay, y también que al menos de
momento no tiene intención de hacer lo mismo con sus filiales de
Malasia, Filipinas o Singapur, pese a que estos tres últimos países
también están en una de las "listas grises" de la OCDE. EFE