Panamá, 20 sep (EFE).- El ministro de Industria y Comercio de
Panamá, Roberto Henríquez, aseguró que el Tratado de Libre Comercio
(TLC) entre Panamá y Estados Unidos no se firmará hasta el año que
viene debido a la agenda política del presidente de ese país, Barack
Obama.
Henríquez dijo en una entrevista difundida hoy por el canal RPC
de la televisión local que el TLC "no está muerto" y aseguró que "el
Ejecutivo estadounidense está buscando el momento apropiado para
presentarlo al Senado y proceder con la ratificación", lo que puede
suceder "en el primer semestre del próximo año".
Henríquez aseguró que Obama "este año se va a concentrar en la
agenda doméstica, lo que también tiene un coste político", ya que
algunas de las reformas que está impulsando, como la de la sanidad,
pueden restarle apoyos en el sector conservador de su partido.
El 17 de julio de 2007, la Asamblea Nacional de Panamá ratificó
el TLC con EE.UU., firmado ese mismo año, tras diez rondas de
negociaciones que se iniciaron el 18 de noviembre de 2003 y
culminaron el 19 de diciembre de 2006.
Sin embargo, para su ratificación el Congreso estadounidense ha
exigido a Panamá modificaciones al régimen de sociedades anónimas
para eliminar las acciones al portador, la firma de un acuerdo de
intercambio de información financiera y reformas a la legislación
laboral para flexibilizar la formación de sindicatos, entre otras.
Según Henríquez, los TLC de Estados Unidos con países como
Colombia y Corea del Sur también se han pospuesto hasta que Obama
considere que tiene suficientes apoyos en el Senado.
El titular de Comercio también se refirió a las sanciones
financieras impuestas a su país por parte de Ecuador e informó de
que estudian hacer uso del "derecho de retaliación (represalia)" y
que han elevado consultas a la Organización Mundial del Comercio
(OMC).
Ecuador mantiene una serie de restricciones al comercio con
Panamá por considerar que se trata de un "paraíso fiscal".
Entre estas sanciones, Henríquez citó los impedimentos a la
importación de ciertos productos provenientes de la Zona Libre de
Colón, zona franca ubicada a 80 kilómetros de la capital, y las
prohibiciones que pesan sobre las empresas que utilizan servicios
financieros en Panamá.
El ministro calificó el contencioso de "pelea de hermanos" y
aseguró que el "derecho de retaliación" solo se ejercitaría conforme
a los tratados internacionales y "después de haber agotado otras
opciones".
Henríqez subrayó que el país está haciendo esfuerzos para
abandonar la denominada "lista gris" de paraísos fiscales de la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Esta lista, que apareció en abril, incluye a 38 países que no
comparten su información fiscal, pero que se han comprometido a
cooperar.
"Vamos a comenzar a negociar tratados para la eliminación de la
doble tributación siguiendo las sugerencias de la OCDE", dijo
Henríquez, quien recordó que ya han iniciado contactos en ese
sentido con España, Italia, México y Holanda. EFE