Shanghái (China), 24 feb (EFE).- La prestigiosa universidad china
de Jiaotong, en Shanghái (este), uno de los dos centros educativos
del país que la prensa estadounidense aseguró que están detrás de
los ataques informáticos a Google, negó que tenga ningún tipo de
relación con las fuerzas armadas chinas.
Según recoge hoy la agencia oficial Xinhua, el director de
relaciones públicas de Jiaotong, Liu Yuxiang, dijo que las
acusaciones de la prensa no tienen fundamento y recordó que la
universidad fue construida por el Ministerio de Educación y el
gobierno de Shanghái, sin ningún tipo de apoyo o relación militar.
"Como en cualquier otro país, nuestros estudiantes también pueden
entrar en el ejército si lo desean, pero no se puede decir que una
escuela tenga un apoyo militar sólo porque algunos de sus
estudiantes son soldados", explicó.
Liu subrayó también los altos niveles éticos tanto de sus
profesores como de sus alumnos, insistió en que la universidad no
apoya los crímenes informáticos.
El diario estadounidense "New York Times" aseguró esta semana,
citando a fuentes no identificadas pero cercanas al caso, que los
especialistas que están investigando los ataques sufridos por Google
y por decenas de empresas estadounidenses el año pasado les llevaron
hasta ordenadores de Jiaotong y de una escuela del noreste chino.
El diario admitió que podría ser una pista falsa, pero indicó que
los investigadores tienen pistas fiables que sugieren que los
sofisticados ataques informáticos pudieron haber salido de Jiaotong
y de la escuela de formación profesional Lanxiang, en la provincia
de Shandong (noreste), a la que atribuyó "lazos con el ejército
chino".
A Jiaotong no la relacionó directamente con el Ejército de
Liberación Popular (ELP), pero destacó que, dentro de su Escuela de
Ingeniería de Seguridad de la Información, especializada en la
seguridad en internet, tanto el decano como el jefe de los
profesores trabajaron antes en asuntos tecnológicos para el ELP.
Pekín respondió ayer por primera vez de forma directa a las
acusaciones de Google el pasado 12 de enero, cuando el portavoz del
Ministerio de Exteriores, Qin Gang, afirmó que no tenían fundamento
y que "China se opone de manera firme" esas afirmaciones, que
considera "irresponsables" y que "responden a ulteriores motivos".
Google amenazó en enero con abandonar sus negocios en idioma
chino después de haber sido objeto de ataques de piratas
informáticos y de la censura del país, una de las más sofisticadas
del mundo y ante la que las multinacionales del sector se han tenido
que doblegar para acceder a un mercado de 384 millones de usuarios.
Disidentes políticos, activistas de derechos humanos, periodistas
y empresarios fueron objeto de estos ataques perpetrados contra sus
correos privados de Gmail, aunque los ataques también permitieron el
acceso a información empresarial interna de algunas compañías
estadounidenses. EFE