Virginia Hebrero
Davos (Suiza), 26 ene (EFE).- El sangriento atentado terrorista del pasado lunes en Moscú ensombreció la presentación en sociedad del presidente ruso, Dimitro Medvédev, quien hoy fue el orador encargado de inaugurar oficialmente el Foro Económico de Davos, donde expuso las posibilidades económicas que ofrece su país.
Ante la exclusiva audiencia de esta cita anual, Medvédev tuvo que cambiar su discurso previsto y comenzar y finalizar subrayando que ningún país es inmune al terrorismo y que éste es la mayor amenaza global a la recuperación económica y la prosperidad.
"Un atentado terrorista puede ocurrir en cualquier lugar y en cualquier momento. Ningún país es inmune al terrorismo", manifestó en presidente ruso.
"Y no tendremos éxito en la lucha contra esta amenaza global a menos que trabajemos juntos, los gobiernos, la sociedad civil y todos los actores para las raíces socioeconómicas del terrorismo, la pobreza, las desigualdades, el desempleo", agregó.
Poco antes de comenzar su discurso, los asistentes a la reunión guardaron un minuto de silencio puestos en pie en recuerdo de las 35 víctimas mortales del atentado terrorista ocurrido en el aeropuerto Domodédovo de Moscú el pasado lunes.
Medvédev justificó su asistencia a Davos a pesar del luctuoso suceso cuando señaló que los autores del atentado buscaban "con ese acto odioso, poner a Rusia de rodillas... y que el presidente ruso no estuviera hoy aquí".
Pero agregó que "calcularon mal, porque Rusia tiene su lugar en el mundo, y es un lugar que ofrece posibilidades económicas, y por eso estoy hablando ante esta tribuna".
El líder ruso enumeró distintas medidas que su gobierno está adoptando para facilitar las inversiones, luchar contra la corrupción y reformar la legislación, al tiempo que declaró que respetará plenamente la libertad en Internet.
"Rusia no apoyará las iniciativas que cuestionan la libertad en Internet, una libertad respetuosa de las normas morales y de la legislación", dijo Medvédev.
Pero de nuevo volvió a referirse al terrorismo, cuando señaló que "Rusia afronta muchas dificultades para construir el imperio de la ley, para luchar contra la corrupción, pero Rusia también se ha tenido que enfrentar (en los últimos años) al terrorismo en su grado máximo".
El presidente reconoció que a su gobierno se le critica a menudo "por su falta de democracia, por tendencias totalitarias", pero tras resaltar los esfuerzos que hacen para cambiar las cosas, dejó claro que "no necesitamos lecciones".
Medvedev anunció que debido al atentado de Moscú se veía obligado a acortar su visita a Davos y a partir inmediatamente después de su intervención.
Pero antes de ella, tuvo tiempo para mantener reuniones con representantes del Consejo Internacional de Negocios, compuesto por un centenar de las más prestigiosas compañías del planeta, como Deutsche Bank, BASF, Goldman Sachs, Nestle, Chevron, Ernst and Young, Renault-Nissan, Coca Cola, Siemens, Exxon Mobil o Cisco.
El Foro Económico Mundial comenzó hoy una nueva cita anual, que se prolongará hasta el domingo, con la vista puesta en el periodo post-crisis que se abre y la preocupación por posibles recaídas.
La crisis de endeudamiento de la zona del euro, el aumento de los precios de los productos básicos o el creciente desempleo son algunos de los asuntos que debatirán los 2.500 invitados miembros de la élite política y económica que asisten y que causan incertidumbre sobre la recuperación.
La creciente importancia de economías emergentes como China e India se refleja en la fuerte presencia de sus delegaciones en Davos. EFE
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