Londres, 8 jun (EFE).- Barclays confirmó hoy que mantiene
conversaciones con el mayor gestor de fondos del mundo, el
estadounidense BlackRock, para la venta de su negocio de gestión de
fondos, una operación con la que podría recaudar cerca de 13.000
millones de dólares (9.376 millones de euros).
En una comunicación remitida a la Bolsa de Londres, el tercer
mayor banco del Reino Unido precisa que tiene que resolver "algunos
asuntos importantes" antes de alcanzar un nuevo acuerdo que anularía
el suscrito hace dos meses con la firma CVC Capital Partners.
El pasado 9 de abril, Barclays anunció la venta de una parte de
Barclays Global Investors, los fondos cotizados conocidos como
iShares, por 4.400 millones de dólares (3.172 millones de euros).
Sin embargo, este acuerdo incluye una cláusula que permite a la
entidad británica seguir negociando la venta de su brazo de gestión
de activos -bien en parte o en su totalidad- bajo una penalización
de 175 millones de dólares en caso de que el contrato se rompa.
Según la prensa británica, los "asuntos pendientes" de Barclays
en la actual negociación con BlackRock son, entre otros, la relación
futura entre las dos compañías, las cuestiones relacionadas con la
regulación de la competencia en EEUU, así como el precio a pagar y
el modo en que este importe se hará efectivo.
En este sentido, insisten en que lo más probable es que BlackRock
haga frente al pago con dinero en efectivo y mediante acciones, con
lo que Barclays -apuntan- podría lograr cerca de un 20 por ciento en
el gestor estadounidense.
La entidad tiene de plazo hasta el 18 de junio para buscar un
comprador.
Según los analistas, Barclays debe vender la división de gestión
de activos en su totalidad, en lugar de limitarse a los iShares, que
representan su parte más atractiva, ya que sin ellos la venta del
resto del negocio sería mucho más complicada.
Al contrario que sus competidores, Barclays ha renunciado en
repetidas ocasiones a recibir ayuda estatal para superar la crisis,
por lo que se ha visto obligado a recurrir a inversores privados
para incrementar su liquidez. EFE