Bruselas, 25 ene (EFE).- La Comisión Europea dio hoy por cerrado
el proceso de reestructuración de la banca británica por medio de
ayudas estatales, tras dar el visto bueno a los dos expedientes
pendientes para las entidades Bradford & Bingley y Dunfermline.
"La decisión sobre el caso de Dunfermline, así como la que
concierne a Bradford & Bingley, cierra el capítulo de las
reestructuraciones bancarias británicas apoyadas por ayudas de
estado en el contexto de la crisis financiera", dice el comunicado
enviado hoy por Ejecutivo comunitario.
La aprobación de ambas ayudas públicas "demuestra una vez más que
la política de la Unión Europea en materia de ayudas de estado ha
formado parte de la respuesta a la crisis financiera", declara la
comisaria de Competencia, Neelie Kroes, en la nota.
El Gobierno británico ya recibió el visto bueno de Bruselas a su
decisión de nacionalizar B&B, con una cuota del 7,7% del mercado
hipotecario británico, en septiembre de 2008, y vender parte de los
activos a Abbey, filial del español Santander, ante el inminente
riesgo de quiebra.
Ahora, la Comisión Europea ha dado su aprobación a la
prolongación de las medidas para financiar la liquidación de la
entidad, aunque avisa de que vigilará el proceso para que no afecte
a la competencia.
En el caso de Dunfermline, el Gobierno dividió la entidad en dos,
vendió los activos "buenos" a la competencia y se quedó con los
activos dañados.
"Las autoridades británicas han optado por una solución centrada
en el mercado, que ha permitido a la competencia comprar las partes
viables de la empresa", explicó Kroes. EFE