Londres, 6 oct (EFE).- La producción manufacturera británica cayó
en agosto el 1,9 por ciento respecto al mes anterior, un descenso
que ha sorprendido a los expertos y que subraya la fragilidad de la
recuperación económica del Reino Unido.
La Oficina Nacional de Estadística (ONS, siglas en inglés)
atribuyó esta disminución a la tendencia de las fábricas a aumentar
su producción en julio y a cerrar en agosto por vacaciones o por
labores de mantenimiento.
La producción industrial -donde se incluye también el sector de
la energía- sufrió un descenso del 2,5 por ciento respecto al mes
anterior, la mayor bajada desde enero.
El regreso al terreno negativo contrasta con las previsiones de
los expertos, que auguraban que la producción manufacturara habría
crecido en torno al 0,4 por ciento en agosto.
"El pésimo dato de agosto apagará en cierta medida el reciente
entusiasmo que se había despertado por la aparente recuperación
económica", explicó Vicky Redwood, una analista de la firma Capital
Economics, a la agencia local de noticias Press Association (PA).
El dato trimestral, menos volátil que el mensual, señala que la
producción manufacturera entre junio y agosto se mantuvo en los
mismos niveles que entre marzo y mayo.
Las cifras difundidas por la ONS muestran significantes descensos
en la producción de maquinaria, productos químicos y eléctricos, así
como en la fabricación de papel y pintura.
En reacción a esos datos, el economista jefe de la Cámara de
Comercio Británica, David Kern, alertó de que un mayor desempleo
"amenaza a las bases del sector manufacturero, lo que sumado a la
debilidad de los préstamos bancarios obstaculiza una recuperación
económica sostenible".
Una de las pocas buenas noticias es el despertar de la producción
de automóviles, que comienza a recuperarse después de unos meses
especialmente difíciles para el sector. EFE