Sídney (Australia), 12 ago (EFE).- La acusación formal de China
contra cuatro empleados de la minera anglo-australiana Río Tinto es
menos grave de lo que inicialmente se pensaba y finalmente no se les
ha implicado en robo de secretos de Estado, informaron hoy fuentes
diplomáticas.
El australiano de origen chino Stern Hu y otros tres trabajadores
de la compañía son sospechosos de "violar secretos comerciales y
aceptar sobornos de individuos no empleados por organizaciones del
Estado", explicó a Efe un portavoz del Ministerio de Exteriores de
Australia.
"No queremos especular, pero las penas para estos delitos son
mucho menos severas", agregó la fuente el mismo día que expiraba el
plazo límite de 37 días de detención sin cargos que contempla la ley
china.
Stern Hu, director general de la oficina de Rio Tinto en Shanghai
y encargado de la venta de mineral de hierro en China, fue arrestado
hace seis semanas en esta ciudad, supuestamente por haber robado
secretos de Estado.
Un estudio oficial chino -desacreditado por Camberra- denuncia
que el "espionaje" de la minera obligó a la siderurgia china a pagar
102 millones de dólares adicionales en los últimos seis años para
importar el mineral.
Se trata de un asunto delicado en las relaciones entre Australia
(país exportador) y China (importador), sobre el que llevan casi
diez meses de conversaciones sin alcanzar ningún acuerdo.
El país asiático quiere una reducción del 45 por ciento sobre el
precio de 2008, mientras Australia ofrece un descuento del 33 por
ciento. EFE