Washington, 14 abr (EFE).- El viceministro de Exteriores chino,
Cui Tiankai, aseguró hoy, en Washington, que la fortaleza del yuan
es un asunto interno y dijo que el país asiático no aceptará
presiones externas para revaluar la moneda.
El viceministro forma parte de la delegación china que se ha
desplazado a Washington para participar junto a otros 46 países en
una cumbre nuclear.
El propio presidente estadounidense, Barack Obama, sacó a
colación el tema de la fortaleza del yuan en la reunión bilateral
que mantuvo ayer con el presidente chino Hu Jintao, así como en la
rueda de prensa celebrada hoy tras el cierre de la cumbre.
En Estados Unidos, varios congresistas han acusado a China de
mantener devaluada su moneda de manera artificial con objeto de
impulsar sus exportaciones, lo que ha dañado al sector manufacturero
estadounidense.
Hoy, Obama consideró que la moneda china está "infravalorada" y
dijo que a China le convendría permitir que se aprecie para que
cotice más de acuerdo con los mercados.
Obama reconoció que China no quiere que otros países se
inmiscuyan en su política económica, pero sin embargo matizó que al
Gobierno de Pekín "le convendría" permitir una alineación del yuan
más de acuerdo con la demanda de los mercados.
Por dos razones, explicó Obama: para facilitar la transición de
una economía basada en las exportaciones, como es la china en la
actualidad, a otra basada en el consumo interno.
Además, con una apreciación del yuan China estaría mejor equipada
para evitar burbujas especuladoras, sostuvo el presidente
estadounidense.
En respuesta, el viceministro chino dijo en un encuentro con los
medios que reformar el sistema de cotización del yuan es un "asunto
interno".
Indicó además que China continuará con reformas en el sistema de
cotización, pero siempre de acuerdo con las necesidades del país y
con su evolución económica y social.
Aunque en los mercados se especula con la posibilidad de que
Pekín realice un cambio en la cotización del yuan esta misma semana,
Cui no dio muestras de que este movimiento se vaya a producir en el
corto plazo. EFE