Santiago de Chile, 28 oct (EFE).- El estadounidense Paul Krugman,
Premio Nobel de Economía en 2008, afirmó hoy en Santiago que a pesar
de que la economía mundial ha logrado sobrellevar "parte de la
crisis actual", sus consecuencias se sentirán por largo tiempo.
"Nos fue bien pasando la crisis, pero falta un tiempo difícil y
extenso, en el que se tendrá que resolver todo", precisó el
catedrático de la Universidad de Princeton al exponer sobre la
crisis y la nueva economía en una reunión organizada por el Banco de
Chile, en Santiago.
Según el también columnista del diario The New York Times, la
recuperación que se observa en la economía mundial no es un proceso
sostenido y se debe más bien a una recomposición de inventarios.
Entre los problemas que tardarán un tiempo en resolverse, según
Krugman, están el crecimiento y el desempleo, que costará superar.
"Pasará mucho tiempo a que vuelvan a sus niveles anteriores",
sentenció.
Aún más, indicó que existen "altas probabilidades" de que el
crecimiento de la economía, que hoy se muestra en alza, vuelva a
disminuir, hasta cifras negativas, en la primera mitad del 2010,
mientras el desempleo continuaría alto hasta el año 2012.
Para una reactivación más de fondo y sostenida, Krugman recomendó
la utilización de "estímulos fiscales vigorosos, pero para ello se
necesita una voluntad política que, a su juicio, "hoy ya no está",
debido a los signos positivos que se observan en la economía
mundial.
"A principios de 2009, cuando caíamos por un barranco, ahí tal
vez se podría haber llegado a un consenso político (sobre los
estímulos) pero hoy ya no", manifestó.
Al explicar las causas por las cuales la actual crisis no se
convirtió en una nueva Gran Depresión, Paul Krugman criticó el
modelo chileno de fondos privados de pensiones y se felicitó de que
que el gobierno de Estados Unidos no haya adoptado uno similar.
"En 2005 estaba de moda adoptar el sistema chileno de pensiones.
Gracias a Dios seguimos teniendo un modelo estatal de pensiones",
sostuvo el economista, mientras elogiaba el aumento del gasto fiscal
por parte de los gobiernos, que en diversos países contribuyó a
amortizar el golpe de la crisis.
El sistema chileno de pensiones, basado en la capitalización
individual de las aportaciones que los trabajadores hacen a un Fondo
de Administración privado fue creado en Chile a comienzos de los
años 80 por José Piñera, ministro de la dictadura de Augusto
Pinochet y hermano del inversionista Sebastián Piñera, actual
candidato de la derecha a la presidencia de Chile.
Krugman destacó que además del mayor gasto estatal, la crisis se
afrontó con bajas en las tasas de interés de los bancos centrales,
la intervención en el mercado financiero y un fuerte estímulo
fiscal.
"Con esto evitamos un Gran Depresión, evitamos el colapso, pero
esta no es toda la historia, evitar el colapso es solo parte del
objetivo, ya que queremos restablecer el equilibrio", aseguró el
economista al advertir que aún existen riesgos de una recaída, que
se pueden aminorar si se mantienen los estímulos fiscales.
Lamentó que, de acuerdo a lo que se observa en el mundo, la
mayoría de esos estímulos van a ser retirados en el segundo semestre
del año próximo.
Krugman destacó que América Latina ha sorteado la crisis "mejor
que el resto del mundo" y que particularmente América del Sur, "ha
sido tocada, pero no tanto como otros países".
Los países de la región "están en una posición sólida,
especialmente Chile", destacó. EFE