Desempleo y fracaso escolar impiden emancipación juventud egipcia, según ONU

El Cairo, 27 jun (EFE).- La alta tasa de desempleo y la falta de formación y acceso a una vivienda son algunos de los obstáculos que impiden la emancipación de los jóvenes egipcios, según un informe sobre Desarrollo Humano de la ONU publicado hoy.

El documento, titulado "Juventud en Egipto: Construyendo el futuro" del Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD), analiza las oportunidades y limitaciones a las que se enfrentan los jóvenes del país árabe, donde el 40 por ciento de la población tiene entre 10 y 29 años.

El informe señala que este colectivo puede ser una "formidable fuerza de desarrollo" si se le proporcionan oportunidades para "aprender bien, encontrar un empleo decente, tener voz, participar productivamente en la comunidad, costear el matrimonio y crear sus propios hogares".

El PNUD subraya que la principal dificultad para la emancipación de los jóvenes es el desempleo que les obliga a permanecer en la vivienda familiar y a sufrir "un prolongado periodo durante el que esperan a empezar sus vidas".

El 90 por ciento de los desempleados en Egipto tienen menos de 30 años y es el desempleo, según el informe, "el tipo más grave de exclusión juvenil".

Además, el 27 por ciento de los jóvenes no ha completado la educación básica y la calidad de la enseñanza es baja, pues faltan docentes cualificados y se forma a graduados que no cumplen los requisitos de un mercado laboral competitivo y globalizado.

La situación es especialmente grave en las zonas rurales, donde las mujeres representan al 82 por ciento de quienes nunca han asistido al colegio.

El mundo rural también concentra el 70 por ciento de las mujeres y el 93 por ciento de los hombres que se casan entre los 15 y 21 años, según el informe, que apunta que en las ciudades el matrimonio se retrasa por el descenso de las oportunidades laborales y el aumento del coste del casamiento.

Para lograr la emancipación de los jóvenes, el PNUD propone superar el fracaso del sistema educativo, romper el ciclo de la pobreza, crear empleo gubernamental, promover la cultura y erradicar la discriminación de las mujeres.

El documento insta además al Gobierno a impulsar la participación de los jóvenes, regular la migración y negociar movimientos temporales de trabajadores con otros países, y mejorar la distribución de la riqueza con el reparto de tierras a jóvenes en regiones costeras o fronterizas con el desierto. EFE