Madrid, 15 ene (EFE).- El Banco Santander y los sindicatos presentes en el grupo (CCOO, UGT, FITC Y SEB) han acordado hoy un protocolo de fusión que garantizará el empleo de la plantilla tras la integración de Banesto.
De esta manera la reducción de plantilla que se prevé llevar a cabo se realizará con medidas "no traumáticas", como la recolocación de los empleados en sucursales extranjeras del grupo o mediante bajas incentivadas.
Según el citado acuerdo firmado hoy, tanto la entidad como los sindicatos son conscientes de que la integración de Banesto conllevará un proceso de reorganización y racionalización, tanto de las redes comerciales como de los servicios centrales y estructuras intermedias de ambos bancos.
Esta reducción se prevé llevar a cabo de manera progresiva y sin medidas traumáticas, así como la elaboración de un plan de armonización y convergencia de las condiciones laborales de la plantilla de Banesto respecto a las del Santander.
Así, el Banco Santander prevé reducir la plantilla dando prioridad a procesos voluntarios y vegetativos, así como medidas de flexibilidad interna, fomentando la reubicación interna o externa del grupo.
El pasado 17 de diciembre, el banco que preside Emilio Botín anunció la integración en el grupo de sus filiales Banesto y Banif.
De esta manera, el banco cerrará 700 oficinas de la red conjunta de las tres entidades antes de finales de 2014 para lograr unas sinergias de 520 millones en tres años.
Aunque todavía el banco no ha precisado el número de trabajadores que se verán afectados, éste podría rondar los 3.000 según los sindicatos. EFE