Buenos Aires, 24 ago (EFE).- La Asociación Internacional de
Transporte Aéreo (IATA) describió hoy como "desastrosa" la situación
por la que atraviesa el sector debido a la crisis global, con una
caída en los ingresos calculada en un 15 por ciento para este año.
"La situación global del sector de transporte aéreo es
desastrosa," dijo el director general de la IATA, Giovanni
Bisignani, ante representantes de la cámara que agrupa a las líneas
aéreas que operan en Argentina.
Bisignani precisó que los ingresos del sector caerán este año a
448.000 millones de dólares, un 15 por ciento menos que los 528.000
millones de dólares de 2008.
"La situación actual de la industria es mucho más grave que la
vivida después del 11 de septiembre (de 2001), cuando los ingresos
de la industria cayeron un 7 por ciento. Nuestra industria nunca ha
enfrentado un desafío financiero de tal magnitud", dijo.
Según el titular de la IATA, las compañías aéreas perdieron
10.400 millones de dólares en 2008 y perderán 9.000 millones este
año.
De acuerdo con datos de organismo, en junio pasado la demanda
mundial de pasajes disminuyó un 7,2 por ciento en comparación con el
mismo mes de 2008, aunque la caída interanual había sido del 9,3 por
ciento en mayo.
Algo similar ocurrió en el segmento de carga, que tras registrar
un desplome interanual del 17,4 por ciento en mayo último, en junio
bajó un 16,5 por ciento frente al sexto mes de 2008.
"Es probable que hayamos tocado fondo en términos de demanda.
Pero aún es necesario que veamos signos de recuperación
significativos. La industria se encuentra en modo de supervivencia.
Es fundamental conservar la liquidez, reducir los costos y gestionar
adecuadamente la capacidad," dijo Bisignani.
Según el directivo, las compañías aéreas latinoamericanas se
comportaron mejor que la media del mercado, con caídas en la demanda
de pasajes y de carga del 4,7 por ciento y 14,2 por ciento,
respectivamente, en junio pasado.
La región se ve aún afectada por los efectos la pandemia de la
gripe A, que hizo bajar la demanda, y por los fuertes descuentos de
precios, que impactan tanto en los ingresos como en la rentabilidad
de las líneas aéreas. EFE