Washington, 27 ago (EFE).- La economía de Estados Unidos perdió
ímpetu entre abril y junio y creció a una tasa anualizada del 1,6
por ciento, ocho décimas menos que lo calculado inicialmente,
informó hoy el Departamento de Comercio.
En el primer trimestre del año, el ritmo de crecimiento había
sido del 3,7 por ciento, y en los últimos tres meses de 2009 había
alcanzado el 5 por ciento.
Los analistas, que ya se temían una corrección a la baja del
crecimiento económico estadounidense, habían previsto que se
situaría entre el 1,2 y el 1,4 por ciento, por lo que el dato dado a
conocer hoy ha sido mejor de lo esperado.
De hecho, los indicadores de Wall Street registraban hoy ascensos
en los minutos previos a la apertura, dado que los datos se dieron a
conocer antes de que se inicie la contratación en los corros.
El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, analizará la
coyuntura económica durante su presentación hoy en el simposio de
jefes de bancos centrales que se celebra en Jackson Hole (Wyoming).
Los mercados esperan que Bernanke señale el rumbo de la política
monetaria de EEUU a la luz de los diferentes indicadores que
muestran una desaceleración en la reactivación económica, tras los
fuertes incrementos que registraron el año pasado al calor del plan
de estímulo económico que puso en marcha el Gobierno de Barack
Obama.
Este es el segundo de los tres cálculos del Producto Interior
Bruto (PIB) que hace el Gobierno y las cifras dadas a conocer hoy
muestran que las importaciones crecieron en el segundo trimestre un
32,4 por ciento, el mayor incremento trimestral desde comienzos de
1984.
El informe también revela que en el segundo trimestre del año las
ganancias de las empresas, después del pago de impuestos, subieron
un 25,5 por ciento.
El Departamento de Comercio también indicó que el gasto de los
consumidores, que en EEUU representan más de dos tercios del PIB,
subió entre abril y junio a una tasa anualizada del 2 por ciento,
cuatro décimas por encima del cálculo inicial. EFE