Seúl, 12 ago (EFE).- El Banco Surcoreano de Desarrollo (KDB)
proporcionará ayuda financiera por valor de 130.000 millones de
wones (74 millones de euros) al fabricante de vehículos Ssangyong
Motor, que se enfrenta al peligro de bancarrota, informó hoy Yonhap.
La noticia del préstamo coincide con el anuncio de la compañía de
que reanudará sus actividades productivas mañana jueves, después de
llegar a un acuerdo con los trabajadores, que llevaban ocupando
hasta la semana pasada la única planta del fabricante, en
Pyeongtaek, a 70 kilómetros al sur de Seúl, durante más de dos
meses.
El fabricante automotriz más pequeño de Corea del Sur, que lleva
desde febrero bajo protección judicial por peligro de quiebra, había
pedido al KDB, propiedad del estado surcoreano, un préstamo de
emergencia de 150.000 millones de wones (86 millones de euros).
La cantidad serviría para cubrir los gastos de reestructuración
debido a los efectos negativos de la crisis sobre Ssangyong y al
desarrollo de un nuevo todoterreno compacto.
No obstante, la KDB se ha negado a financiar el desarrollo de
este nuevo utilitario.
"El banco ha decidido proporcionar fondos para facilitar los
esfuerzos de reestructuración de la compañía, incluidos las
indemnizaciones", dijo hoy el KDB, que informó asimismo que
utilizarán las instalaciones del fabricante como aval al préstamo.
El sindicato que representa a los trabajadores y los
representantes de Ssangyong llegaron la semana pasada a un acuerdo
sobre el número de despidos que debería incluir el plan de
reestructuración de la compañía, poniendo fin así a una huelga de 77
días y a varias jornadas de violentos enfrentamientos entre
empleados y la Policía.
Este fabricante de vehículos debe ya 240.000 millones de wones
(137 millones de euros) en préstamos y además, la huelga de los
últimos meses, le ha supuesto pérdidas de producción de cerca de
316.000 millones de wones (180 millones de euros).
Ssangyong, propiedad del fabricante chino Shanghai Automotive
Industry, debe presentar su plan de reestructuración para el 15 de
septiembre, pero si el Tribunal lo rechaza, se enfrenta a la
bancarrota. EFE