Fráncfort (Alemania), 13 ago (EFE).- El Banco Central Europeo
(BCE) considera que "la recesión global ha tocado fondo" y que en la
zona del euro "el ritmo de contracción se ralentiza claramente".
En su boletín mensual de agosto, publicado hoy, el BCE advierte
de que "la actividad económica será débil en lo que queda de año".
"La significante política de estímulo en todas las principales
áreas económicas debería apoyar el crecimiento global, incluida la
zona del euro", dijo el BCE.
El consejo de gobierno del banco europeo decidió la semana pasada
mantener los tipos de interés en el 1 por ciento, un nivel
históricamente bajo para apoyar el crecimiento económico de los
países que comparten el euro.
El BCE aseguró que "el año que viene, tras una fase de
estabilización, se espera una recuperación gradual con tasas de
crecimiento trimestrales positivas".
No obstante, pese a que su valoración de la economía de la zona
del euro y global es más optimista que en otras ocasiones, el BCE
mantiene un tono de cautela y advierte de que "la incertidumbre es
todavía elevada".
Por ello, el consejo de gobierno considera que es muy probable
que los próximos datos económicos sean volátiles.
El BCE pidió a los bancos comerciales de la zona del euro que
tomen las medidas necesarias para fortalecer más sus bases de
capital y que se aprovechen de las medidas gubernamentales de apoyo
al sector financiero, especialmente las que tienen que ver con la
recapitalización.
El banco europeo señaló que el flujo de créditos de los bancos al
sector privado permaneció contenido en junio, aunque con diferencias
en los sectores.
El flujo de préstamos a las empresas cayó en junio debido a una
contracción en los créditos a corto plazo, según el BCE.
No obstante, el flujo de préstamos a los hogares fue en junio
algo más positivo que el mes anterior. EFE