Investing.com - El dólar canadiense perdió posiciones con respecto a su homónimo estadounidense este lunes después de que los datos sobre el escaso crecimiento salarial de Estados Unidos lastraran las expectativas acerca de la subida de los tipos de interés de este año.
El par USD/CAD alcanzó máximos en 1,3086; posteriormente, el par se consolidó en 1,3080, avanzando un 0,47% en el conjunto de la jornada.
El índice dólar, que sigue la evolución de esta moneda con respecto a una cesta de otras seis divisas principales, avanzó un 0,38% hasta 100,06.
El billete verde cerró el viernes a la baja por cuarta semana consecutiva después de que el informe sobre empleo de Estados Unidos indicara que, aunque el crecimiento del empleo haya superado las expectativas, el crecimiento salarial sigue siendo algo escaso.
Esta ralentización del crecimiento salarial seguramente provocará que la Reserva Federal adopte una postura más prudente a la hora de subir los tipos de interés este año.
Según el Barómetro de Tipos de la Fed de Investing.com, hay menos de un 10% de probabilidades de que la subida de los tipos tenga lugar en su próxima reunión de marzo. Las probabilidades de que esto ocurra en junio son de un 50%.
La Fed, que subió los tipos en diciembre, indicó que implementaría tres subidas de los tipos de interés este año.
La semana pasada, la Fed se reafirmó en su opinión de que la economía está mejorando, aunque no dio ninguna señal clara sobre cuándo realizará la próxima subida de los tipos, pues los funcionarios aguardan a evaluar el posible impacto de la postura proteccionista de la Administración de Trump y sus recientes declaraciones sobre las divisas.
El billete verde se ha visto zarandeado por las preocupaciones suscitadas en torno a que el debilitamiento del dólar podría tener un papel crucial en el plan de “poner América en primer lugar”.
La caída de los precios del petróleo, una de las principales exportaciones de Canadá, también ha lastrado el dólar canadiense.
Los precios del petróleo siguen sometidos a una gran presión ante las preocupaciones acerca de que el aumento de la producción de Estados Unidos pueda desbaratar los esfuerzos de otros productores para requilibrar la oferta y la demanda global de petróleo.