Atenas, 14 abr (EFE).- El Parlamento griego aprobó hoy una
reforma fiscal para luchar contra el fraude y la evasión de
impuestos con el fin de aumentar la captación de fondos y reducir el
abultado déficit público del 12,7% del PIB.
El primer ministro, Yorgos Papandréu, calificó la reforma de
"revolucionaria" y beneficiosa para el conjunto de la sociedad.
"Estamos enviando un mensaje claro: de ahora en adelante no habrá
más impunidad para la evasión y el fraude en los impuestos. Este
mensaje significa igualdad ante la ley", declaró Papandréu en el
parlamento, según la agencia Athens News.
La nueva legislación aumenta el control sobre las grandes
operaciones monetarias en efectivo, medida destinada a luchar contra
el fraude fiscal que supone para el Estado dejar de recaudar miles
de millones de euros anuales.
También acaba con ciertos privilegios fiscales que disfrutaban
algunos profesionales como taxistas, camioneros, abogados y médicos,
entre otros.
Miles de taxistas han iniciado hoy en Atenas una protesta de 48
horas contra la nueva ley, que les exige emitir facturas para
justificar sus ganancias.
Otro aspecto polémico es el aumento de la presión fiscal sobre la
Iglesia ortodoxa, lo que ha causado protestas de los religiosos.
El Gobierno socialista está aplicando un estricto plan de ahorro
que pretende reducir el déficit público en cuatro puntos en 2010,
hasta el 8,7 por ciento del PIB, por medio de importantes recortes
sociales y la congelación de los salarios en el sector público.
El pasado domingo, los países de la eurozona pactaron conceder a
Grecia, en caso de necesidad, créditos por un valor total de 30.000
millones de euros para ayudar a Atenas a sortear una posible
suspensión de pagos. EFE