Sao Paulo, 8 ene (EFE).- El sector minero puso a trabajar la
bolsa de Sao Paulo en la primera semana del año, que terminó hoy con
una subida acumulada del 2,44 por ciento y su índice Ibovespa
ubicado en los 70.262 puntos.
La subida del precio de los metales en los mercados
internacionales fue un factor determinante para explicar la semana
de bonanza del corro brasileño en la primera semana de 2010.
La gigante minera Vale, mayor empresa privada brasileña, arrebató
a la petrolera estatal Petrobras el lugar de honor de líder de los
negocios en la plaza y, además, calentó los hornos de la maquinaria
bursátil con alzas sostenidas en las cinco jornadas.
A parte de la pujanza de este sector, que tiene un ojo puesto en
la recuperación de Estados Unidos y otro en el vigor de la economía
China, también influyeron indicadores llegados tanto de Brasil como
de Norteamérica.
Los indicios de mejoría de la economía local llevaron a los
inversores a mejorar sus previsiones para este año y elevaron hasta
el 5,2% su cálculo sobre el crecimiento del Producto Interior Bruto
(PIB) del país suramericano.
La publicación de la balanza comercial demostró que, poco a poco,
se va recuperando el vigor de las exportaciones, que sumaron 152.995
millones de dólares en todo 2009, según el dato revisado por el
Gobierno publicado hoy.
Desde Estados Unidos, se sucedieron las noticias irregulares,
algunas favorables y otras negativas, en cuanto a la recuperación
del empleo, la producción del sector manufacturero y las ventas
mayoristas.
Con todo, el conjunto de estos factores se leyó en Sao Paulo como
una sucesión de pasos tenues hacia la revitalización del principal
socio comercial de Brasil, lo que sin duda sirvió para animar a los
inversores.
La única noticia netamente negativa fue el dato de empleo
divulgado este viernes, que supuso un leve freno para el Ibovespa
que, con todo, comenzó 2010 con optimismo y rebasando el umbral de
los 70.000 puntos, desconocido desde hace 19 meses.
El descenso del viernes (-0,27%) se acumuló al leve traspié del
jueves (-0,39%) que respondió a un típico y movimiento de
realización beneficios, esperado por los analistas tras ocho alzas
consecutivas.
En cualquier caso, la bolsa brasileña prosiguió con su senda de
recuperación que la situó a apenas 3.254 puntos de su máximo
histórico, anotado el 20 de mayo de 2008.
El vigor de la economía brasileña invita a pensar en horizontes
más altos y algunos analistas ya indican el listón de los 85.000
puntos como un nivel que se alcanzará a lo largo de este año.
La buena marcha de Brasil tuvo su lógico reflejo en el mercado de
divisas y el real continuó su tendencia de revalorización frente al
dólar estadounidense.
La moneda brasileña cerró con un repunte semanal del 0,63%, que
se sumó a las ganancias del 25,4% acumuladas en 2009 y que dejó el
billete verde cotizado hoy a 1,73 reales para la venta en el mercado
comercial. EFE