Managua, 30 mar (EFE).- Los empresarios nicaragüenses criticaron
hoy la falta de flexibilidad que muestra la Unión Europea (UE) en la
negociación de un acuerdo de asociación con los países
centroamericanos.
"Centroamérica defendió sus posiciones con mucha fortaleza, pero
la Unión Europea no quiso ceder en nada y al final el cierre del
pilar comercial se prolongó para la última ronda" de conversaciones,
señaló a los periodistas el miembro del Consejo Superior de la
Empresa Privada (Cosep) de Nicaragua, Mario Amador.
Se espera que los europeos abran ese mercado a los
centroamericanos, dijo Amador, gerente general del Comité Nacional
de Productores de Azúcar, al comentar la última ronda de
negociaciones entre ambos bloques que se celebró la semana pasada en
Bruselas.
Por su lado, el presidente de la Asociación Nicaragüense de
Arroceros (Anar), Fernando Mansell, en declaraciones a la prensa
local, pidió al empresariado centroamericano no aceptar ese acuerdo
con la UE en "las condiciones actuales".
"Aquí hay mucha letra escondida porque dicen que es un acuerdo
comercial, pero Europa pone trabas a los productos agrícolas, que es
el desarrollo de la región. Debemos reflexionar los negociadores de
nuestros países en si conviene seguir esa negociación", afirmó
Mansell.
Otro miembro del empresariado nicaragüense, Henry Thompson,
sostuvo que continuarán "peleando" en esas negociaciones, en
especial en el tema de las normas de origen del café, el principal
producto de exportación de este país.
"Significa que, si se va a permitir café tostado y molido, sea
100 por ciento centroamericano, pero ellos (UE) plantean 90/10, y
nosotros decimos que es inconcebible, porque si aceptamos sería un
gran riesgo que sería perjudicial para la región", especificó.
Thompson explicó que el riesgo está en que si se concede ese 10
por ciento se puede mezclar café enviado de Centroamérica con granos
de otros países sin la misma calidad, y al final se etiquete como
centroamericano.
"Vamos a suponer que la mezcla empacada para el consumo al final
no sea robusta, con el sabor, aroma y calidad del café nicaragüense,
en nuestro caso. Si ese producto sale mal, se da a conocer al resto
del mundo" y afecta la calidad y prestigio del café local, ilustró.
El Comité Empresarial Centroamericano (CECA) denunció el fin de
semana pasado que no está de acuerdo con la marcha de las
negociaciones con la UE, que los avances son mínimos y que nadie se
siente "cómodo" con el nivel de apertura ofrecido por Europa.
Pese a esas diferencias, el empresariado nicaragüense espera que
el tratado sea suscrito el 18 de mayo próximo en Madrid.
Ayer, el sector de la maquila de Honduras también pidió al bloque
europeo que flexibilice su postura en las negociaciones, si bien la
Cámara de Exportadores de Costa Rica calificó hoy como positivo el
avance logrado la semana pasada en Bruselas .
El acuerdo de asociación consta de tres pilares: diálogo
político, cooperación y comercio. EFE