México, 2 ago (EFE).- Las empresas de todo tipo que operan en
México "destinan un 5% de sus ingresos anuales al pago de sobornos"
y un 77% de ellas admite haber padecido un fraude en el último año,
revela hoy una encuesta de la firma de auditoría KPMG y difundida
por Consulta Mitofsky.
"El 44% de las empresas (...) ha reconocido haber realizado algún
pago extraoficial a servidores públicos" y un 67% de las firmas
reconoce que la corrupción "tiene un efecto negativo en su
competitividad", agrega la Encuesta sobre Fraude y Corrupción en
México 2008.
Según el estudio, el principal detonador de la corrupción en
México es la lentitud de los trámites (47%), seguido de las multas
injustificadas (27%), la pérdida de contratos y el aumento de costos
de operación (21% en ambos casos) y falta de vigilancia e
inseguridad (7%).
"El nivel de gobierno donde más incidencia existe de este tipo de
pagos extraoficiales es el municipal. Seis de cada diez empresas
consideran que los pagos extraoficiales a servidores públicos tienen
un impacto significativo en sus proyecciones de inversión en
México", asegura KPMG.
Dentro de las mismas empresas son comunes los fraudes,
perpetrados en general por los propios empleados (46%).
Su perfil es el de un varón de entre 25 y 35 años, con una
antigüedad de uno a tres años que ocupa una posición de mando medio
u operativo.
La mayor parte de estos delitos internos es el robo de
inventarios o la asociación fraudulenta con los proveedores de las
empresas.
En el 25% de los casos el monto defraudado fue superior a un
millón de pesos (aproximadamente 75.000 dólares), y en un 10% la
cifra llegó a superar los 5 millones de pesos (375.940 dólares).
EL resultado de estas circunstancias adversas relacionadas con la
corrupción y el fraude fue un aumento en los costes de operación
para las compañías (53%), una pérdida de confianza entre empleados
(41%) y daños a la imagen de las empresas (25%).
"En el 60% de los casos, el fraude fue detectado por medio de
controles internos y auditoría interna", pero en un 86% sucedió unos
seis meses después de cometido el ilícito, señalaron los ejecutivos
consultados.
En este país "solo el 43% de los casos de fraudes detectados es
denunciado ante las autoridades", un porcentaje inferior al 60% que
hay en EE.UU., indica KPMG.
Las áreas más vulnerables a padecer fraudes en México son las de
ventas-mercadotecnia (48%), logística-almacenaje-operaciones (42%),
administración y finanzas-contabilidad (21%), compras (13%) y
producción (10%).
La firma auditora señala que, pese a lo extendido del problema,
"solo el 2% de las empresas que han sido defraudadas implementa o
corrige sus mecanismos de control interno".
Las causas citadas de esta situación son sobre todo "fallas de
supervisión del personal, falta de controles internos y una
deficiente infraestructura ética", asegura KPMG.
El estudio se elaboró tras consultar a 235 directivos de un
número no determinado de empresas cuyos ingresos oscilan entre 200 y
5.000 millones de pesos (de 15 a 376 millones de dólares).
De todas las compañías consultadas el 30% fueron del sector
manufacturero, seguidas por las de consumo (21%), servicios
financieros (15%), hostelería y turismo (12%), telecomunicaciones
(10%), energía (6%), construcción (3%), y química (2%), entre otros.
EFE