Shanghái (China), 23 sep (EFE).- La corporación estadounidense
Dover, que produce equipos y productos industriales, planea duplicar
su inversión y sus ventas en China en los próximos tres años, y para
ello ha inaugurado una oficina en la ciudad de Shanghái, su primer
centro de operaciones fuera de EEUU.
"Aunque tenemos presencia en China desde 1985, ahora tendremos un
centro de operaciones desde el que conectar todos nuestros negocios
en la región por primera vez", afirmó Robert A. Livingston,
presidente de la compañía, en un comunicado publicado hoy.
Para Livingston, "las nuevas oficinas significan un salto
importante en la forma en la que hacemos negocios en Asia, y
facilitarán nuestra búsqueda de oportunidades de crecimiento que
vemos en la región".
Según informó hoy el diario Shanghai Daily, la corporación
estadounidense ha invertido cerca de 152 millones de dólares (103
millones de euros) en sus operaciones en China.
"Quiero que durante los próximos años, los ingresos fuera de
norteamérica superen el 50 por ciento del total de la compañía, y
una parte significativa de este crecimiento internacional espero que
venga de China", afirmó Livingston.
Las ventas de Dover en China ascendieron a 400 millones de
dólares (270 millones de euros) en el último año, mientras que sus
beneficios globales llegaron a los 7.600 millones de dólares (5.135
millones de euros). EFE