Berlín, 5 nov (EFE).- Los líderes de las regiones autónomas
alemanas con plantas de Opel se reunieron hoy en Berlín con el
gobierno de la canciller Angela Merkel con el objetivo de coordinar
una estrategia conjunta tras la decisión de General Motors de no
vender su filial europea.
Los democristianos Roland Koch, primer ministro de Hesse, Jürgen
Rüttgers, de Renania del Norte-Westfalia, y Christine Lieberknecht,
de Turingia, así como el socialdemócrata Kurt Beck, de
Renania-Palatinado, acudieron a la reunión junto con el ministro de
Economía, Rainer Brüderle, y el de la Cancillería, Ronald Pofalla.
La cita, inicialmente prevista para el viernes, se convocó a
última hora del jueves, tras la conmoción causada en Alemania por la
decisión ayer de General Motors.
Koch, en cuyo estado está la central de Rüsselsheim, pidió
previamente cohesión en la búsqueda de una solución y pronosticó
semanas de intensas y duras conversaciones a varias bandas.
Miles de trabajadores de Opel en Alemania secundaron hoy los
paros convocados por los sindicatos en protesta por la decisión de
General Motors y se prevé que las movilizaciones se extiendan en los
próximos días a otras factorías europeas.
En Alemania, donde Opel emplea a unos 25.000 trabajadores en
cuatro factorías -Rüsselsheim, Eisenach, Bochum y Kaisersleutern- la
decisión de GM cayó como un mazazo y el propio Koch llamó a los
trabajadores a luchar por el futuro de las plantas.
La canciller Merkel ha abordado la cuestión con el presidente de
Estados Unidos, Barack Obama, y le ha anunciado que pedirá al grupo
automovilístico estadounidense que presente cuanto antes un plan de
viabilidad para su negocio europeo.
Según informó el portavoz del gobierno alemán, Ulrich Wilhelm, la
conversación telefónica tuvo ya lugar ayer mismo, y en ella Merkel
señaló a Barack que su gobierno instará a GM a que presente cuanto
antes su plan para Opel y que devuelva hasta finales de noviembre el
crédito puente.
El gobierno alemán concedió a General Motors un crédito de 1.500
millones de euros para garantizar la supervivencia de Opel hasta que
se materializara la operación de venta al fabricante
austro-canadiense Magna. El crédito vence el 30 de noviembre.
En la conversación Obama aseguró a Merkel no haber estado
"implicado" en la decisión del consejo de administración de General
Motors del martes, en la que se tomó la controvertida decisión de
anular la venta a Magna.
La decisión causó malestar y desilusión en el gobierno de Berlín,
que había dado por cerrada la operación.
Según Wilhelm, Merkel y Obama han acordado coordinarse en todo lo
afecte al futuro de Opel. EFE