Buenos Aires, 25 ago (EFE).- Las patronales rurales de Argentina
anunciaron hoy que realizarán una nueva huelga comercial en protesta
contra las políticas hacia el sector que aplica el Gobierno de
Cristina Fernández, que se niega a bajar los impuestos a las
exportaciones de granos.
La huelga, la tercera en lo que va del año y la octava desde que
se inició el conflicto en marzo de 2008, se iniciará en la
medianoche del próximo viernes y por siete días supondrá la no
comercialización de granos con destino a industrias y exportación y
el no envío de ganado en pie a los mercados de hacienda.
La nueva medida de fuerza fue resuelta en una reunión celebrada
hoy por los dirigentes de la Federación Agraria, la Sociedad Rural,
las Confederaciones Rurales Argentinas y la Confederación
Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), que representan a unos
290.000 productores.
En rueda de prensa, el titular de Coninagro, Carlos Garetto, dijo
que espera que el nuevo cese de comercialización "sirva" para hacer
"recapacitar y reflexionar" al Gobierno.
La convocatoria a la nueva huelga comercial se concreta horas
después de que Fernández vetará una ley de emergencia agropecuaria
aprobada por el Parlamento la semana pasada con el aval oficialista,
pero que contenía bajas y hasta eliminaciones de los derechos de
exportación de granos en distritos de la provincia de Buenos Aires.
Los impuestos a las exportaciones de soja, girasol, trigo y maíz
son el eje de un conflicto desatado en marzo del año pasado entre
las patronales agrarias y el Gobierno, que se niega a bajar la
presión tributaria.
Garetto dijo que el veto a la ley de emergencia agropecuaria, una
norma que daría de "algo alivio" a los agricultores afectados por la
grave sequía que afectó al país, fue "la gota que rebasó el vaso".
El dirigente dijo que además hay "malestar en el campo" porque
tras la reunión que las patronales mantuvieron el 31 de julio pasado
con ministros del Gobierno, los productores no han recibido "ninguna
respuesta" a las propuestas elevadas por las entidades rurales para
resolver la "grave crisis" que afecta al sector.
El dirigente de Coninagro indicó que una vez que finalice la
nueva huelga, las patronales mantendrán un "plan de lucha" y
permanecerán en "en estado de sesión permanente para evaluar los
pasos a seguir".
Los dirigentes agropecuarios reiteraron que aspiran a que luego
del 10 de diciembre, cuando cambie la composición parlamentaria tras
la derrota del oficialismo en los comicios de junio pasado, el
Legislativo debata iniciativas que mejoren la situación del sector.
EFE