Washington, 8 abr (EFE).- El Fondo Monetario Internacional (FMI) rebajó hoy el crecimiento esperado para Brasil en 2014 en cinco décimas, hasta el 1,8 %, y para 2015 en algo menos, dos décimas, hasta el 2,7 %.
El informe "Perspectivas Económicas Globales", publicado hoy por el FMI, espera que Brasil cierre el año por debajo del 2,3 % de crecimiento registrado en 2013, algo que la institución multilateral ve como "una situación preocupante" y que se da también en otras economías emergentes importantes como Rusia, Sudáfrica y Turquía.
"La economía brasileña se mantendrá a un ritmo bajo, con el crecimiento ralentizándose al 1,8 % en 2014. Las limitaciones por el lado de la oferta, especialmente en infraestructuras, y la insistente baja inversión privada son lastres en la actividad y reflejan la baja competitividad y confianza empresarial", indica el FMI.
La depreciación del real y la alta inflación es otro de los problemas que subraya el informe del FMI, que espera que la política monetaria brasileña se mantenga neutral este año, tras haber sido restrictiva durante el pasado ejercicio.
No obstante, según el Fondo, la demanda se está apoyando en esa depreciación de la divisa local -que abarata las exportaciones-, así como en "los aún boyantes salarios y el crecimiento del consumo", algo que contrasta con la baja inversión privada y que es síntoma de una mala confianza empresarial.
EL FMI espera que la inflación cierre este año en el 5,9 %, en la parte alta de la franja objetivo del Gobierno brasileño, y baje ligeramente en 2015, hasta el 5,5 %.
La balanza por cuenta corriente mantendrá hasta 2015 un déficit similar al del año pasado, del 3,6 % del PIB, mientras que el desempleo repuntará levemente desde el 5,4 % de 2013 hasta el 5,6 % en 2014, para pasar al 5,8 % el año siguiente.
Brasil es la primera economía latinoamericana y una de las emergentes que más ha visto rebajada la proyección de crecimiento de su producto interior bruto (PIB) para los próximos dos años, junto con Rusia y Sudáfrica.