Lisboa, 3 dic (EFE).- Portugal colocó hoy en el mercado 850 millones de euros en deuda a doce meses, un montante más elevado de lo anunciado inicialmente, a cambio de un interés del 0,28 %, una tasa más baja que la registrada en la última subasta similar.
Según los datos del Tesoro luso, la operación atrajo a los inversores, ya que la demanda prácticamente duplicó la oferta de títulos a la venta.
De hecho, la venta estaba limitada en un principio a un máximo de 750 millones de euros, aunque la baja rentabilidad exigida por los inversores llevó a colocar más deuda de lo previsto.
El interés del 0,28 % es cuatro centésimas inferior a la registrada en noviembre, cuando en una subasta equivalente esta tasa quedó en el 0,32 %.
No obstante, el mínimo histórico en las letras lusas con vencimiento a un año se alcanzó el pasado agosto, cuando se compraron a cambio de un rendimiento del 0,21 %.
El descenso en las tasas exigidas por los inversores para comprar títulos portugueses ha sido especialmente expresivo durante el último año, ya que en diciembre de 2013 por estas mismas letras se pagaba un 1,49 %.
Los bajos intereses son un reflejo del ambiente de calma que se vive en los mercados, en contraste con la presión a la que se vio sometido Portugal y otros países durante los peores momentos de la crisis.
Precisamente fue la fuerte subida de estas tasas la que llevó a Lisboa a recurrir el rescate financiero en abril de 2011, ya que su acceso a financiación se encareció hasta niveles insostenibles.
En el mercado secundario -donde los inversores compran y venden títulos adquiridos en subastas públicas como la de hoy- también es perceptible ese contexto de tranquilidad, y hoy mismo las obligaciones lusas a diez años batieron un mínimo histórico.
Concretamente, estos títulos -utilizados por los analistas como referencia- llegaron a cotizar al 2,78 %, lejos del 17 % que alcanzaron a superar en enero de 2012.