Washington, 31 ago (EFE).- Los fabricantes de automóviles dan a
conocer mañana sus ventas en Estados Unidos en agosto, entre señales
de que los resultados serán los mejores experimentados por el sector
en los pasados 12 meses gracias al programa "Dinero por chatarra".
La firma de estudios del sector J.D. Power señaló que los datos
de los primeros 13 días de agosto muestran que las ventas a
particulares fueron un 2 por ciento superiores a las de hace un año,
el primer aumento desde junio de 2007.
Los datos recopilados por J.D. Power, procedentes de
transacciones en tiempo real realizadas por más de 10.000
concesionarios en todo el país, también señalan que por primera vez
en 12 meses el sector puede haber superado la cifra de 1 millón de
ventas a particulares.
Pero a pesar de este incremento, J.D. Power dijo que las ventas
totales del mes se situarán en torno a los 1,1 millones de
vehículos, un 8 por ciento menos que en agosto de 2008, debido a la
reducción en un 50 por ciento de las ventas de flotas de vehículos.
Gary Dilts, vicepresidente de Operaciones Globales del Automóvil
de J.D. Power, dijo que la situación de la demanda ha mejorado
debido a una mayor confianza de los consumidores sobre su situación
económica y el programa "Dinero por chatarra", conocido oficialmente
por la sigla CARS.
"La mejora de la confianza del consumidor y la disponibilidad del
crédito durante los pasados seis meses se han combinado con el
programa CARS para sacar las ventas del sector de sus deprimidos
niveles, un 35 por ciento por debajo en términos anuales", explicó
Dilts.
Los dos principales fabricantes estadounidenses de automóviles,
General Motors y Ford, reconocieron que CARS impulsó sus ventas en
agosto aunque también dijeron que son conscientes de que sus efectos
serán pasajeros.
Brent Dewar, vicepresidente de GM, dijo el pasado viernes que es
seguro que el sector experimentará "una resaca" porque la demanda de
los próximos meses no será tan fuerte como la de julio y agosto una
vez que CARS ha concluido.
Por su parte, Mark Fields, presidente de Ford para el continente
americano, dijo que CARS había sido un programa "de gran éxito".
El programa terminó el pasado 23 de agosto tras generar 690.114
ventas de automóviles nuevos, con un coste de 2.880 millones de
dólares para el Tesoro estadounidense.
Según los datos del Departamento de Transporte, el fabricante que
más se benefició del programa fue Toyota, con una cuota del 19,4 por
ciento del dinero de CARS. Al fabricante japonés le siguió GM, con
un 17,6 por ciento, Ford, con un 14,4 por ciento, y Honda con un 13
por ciento. EFE