Lisboa, 23 jul (EFE).- La cotización del Banco Espírito Santo (BES) se disparó hoy con subidas superiores incluso al 13 %, después de que la entidad anunciara la entrada en su capital de dos nuevos accionistas.
El valor bursátil del BES acumuló una caída superior al 60 % en poco más de un mes, pero desde que alcanzara su nivel más bajo, el pasado día 15 (a 38 céntimos), el precio por título del BES muestra tenues señales de recuperación y hoy ascendía a 47 céntimos.
La entidad financiera -la más importante a nivel de activos de Portugal- se vio afectada en los mercados por formar parte del Grupo Espírito Santo, un enorme conglomerado empresarial en donde varias compañías a las que concedió créditos corren el riesgo de declararse en insolvencia.
A instancias del banco central luso, la familia Espírito Santo fue apartada de la gestión del BES con Ricardo Salgado al frente, que dejó el cargo tras 22 años y fue sustituido por el economista Vítor Bento.
La estrategia públicamente defendida por las autoridades portuguesas -incluido el Gobierno y el propio jefe de Estado- pasa por diferenciar el Grupo Espírito Santo del BES, donde la familia es el mayor accionista con el 20,1 % de los títulos.
Entre las compañías que cuentan con participaciones cualificadas se sitúan desde ayer la firma de inversión estadounidense Goldman Sachs, que posee ahora el 2,27 %, y la gestora de fondos Desco, propiedad del gestor de fondos de alto riesgo y multimillonario norteamericano David E. Shaw, con el 2,71 %.
El resto de su accionariado lo compone el Grupo Espírito Santo a través de una sociedad financiera (20,1 %), el banco francés Crédite Agricole (14,6 %), la brasileña Bradesco (3,9 %) y la operadora Portugal Telecom (2,1 %).
La evolución positiva de los títulos del BES en la Bolsa de Lisboa se produjo hoy pese que también ayer una de las sociedades financieras filiales del Grupo Espírito Santo, Rioforte, solicitó formalmente acogerse a una "gestión controlada", figura jurídica similar al concurso de acreedores.