Madrid, 10 may (EFE).- Repsol ha subrayado hoy que sigue trabajando para lograr la compensación que merece y defender sus derechos tras la expropiación del 51 % de su capital en YPF, por lo que pide 10.500 millones de dólares (unos 8.000 millones de euros).
La petrolera también ha detallado hoy ante los analistas que cifra en 5.700 millones de dólares (4.404 millones de euros) su exposición máxima por YPF: 4.100 millones de dólares (3.167 millones) por el valor contable (en libros) y 1.600 millones por el préstamo de los Petersen (1.235 millones).
Sobre este último punto, el director financiero de la petrolera, Miguel Martínez, ha señalado que tendrán que "esperar y ver" cómo está la situación de los Petersen, que tienen entorno al 25 % del capital de YPF, con los bancos.
El directivo ha insistido además en que la caída de la participación de Repsol en YPF "no ha sido voluntaria".
En cuanto a las consecuencias de la expropiación en la situación financiera de la empresa, Martínez ha señalado que analizan opciones para mejorar el balance y que no cree que las revisiones de rating afecten a la deuda y a los costes de financiación.
Entre estas medidas, el directivo ha dicho que se emitirán bonos convertibles en septiembre u octubre y ha avanzado que se optará por cobrar el dividendo de su participada Gas Natural en efectivo. La petrolera no planea grandes desinversiones de activos para este año.
En cuanto a las previsiones de negocio, Martínez ha señalado que prevé explorar unos 20 pozos más en 2012 y ha apuntado a los proyectos existentes en Brasil, Alaska o Cuba.
Tras YPF el futuro de la compañía sigue, ha subrayado el directivo de la petrolera, que el próximo 29 de mayo presentará su nuevo plan estratégico hasta 2016. EFE