Atenas, 9 feb (EFE).- Grecia continúa sin cerrar los últimos detalles del acuerdo con la troika para recibir un nuevo préstamo de 130.000 millones de euros que evite su bancarrota a pesar de haber transcurrido toda una noche de negociaciones a varias bandas.
Durante ocho horas, los líderes de los partidos políticos que apoyan al gobierno -socialdemócratas, conservadores y ultraderecha- discutieron la respuesta a las exigencias de nuevas medidas de austeridad por parte de la troika y alcanzaron un acuerdo en todos los puntos a excepción de los recortes de pensiones.
Posteriormente, los representantes del Fondo Monetario Internacional (FMI), la Comisión Europea (CE), y el Banco Central Europeo (BCE), que encabezan la delegación de la troika, se reunieron de nuevo con el primer ministro griego, Lukás Papadimos, el ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, y el de Trabajo, Yorgos Kutrumanis, para tratar de cerrar el acuerdo.
Esta última reunión se prolongó durante cuatro horas y, aunque se produjeron avances según los medios griegos, no se ha podido lograr un consenso en el tema de las pensiones.
Al termino de esta última reunión, en torno a las 6.00 (4.00 GMT), Venizelos, anunció que partiría "en breve" hacia Bruselas para participar en la reunión del Eurogrupo, prevista para las 17.00 GMT de hoy en la capital belga y con el objetivo de tratar la cuestión griega, y llamó a la "responsabilidad" a todos los negociadores.
"De ello depende que el país permanezca en la Eurozona y la identidad europea (de Grecia). Es tiempo de que todos asuman sus responsabilidades. No hay lugar para otras consideraciones", advirtió.
Además, reiteró que "todos los asuntos menos uno" han sido acordados.
De acuerdo a la emisora Real FM, la troika habría dado dos semanas al gobierno griego para que encuentre de dónde ahorrar 300 millones de euros, o de otro modo ordenará proceder con recortes más drásticos sobre las pensiones.EFE