Nueva Delhi, 21 oct (EFE).- La economía india crecerá el 6,5 por
ciento en el actual ejercicio fiscal, que concluye en marzo de 2010
debido al descenso del sector agrícola y a la desaceleración de los
servicios, según las previsiones difundidas hoy por el Gobierno.
"Es improbable que el crecimiento sea inferior al 6,25 por
ciento, pero podría alcanzar el 6,75 por ciento", dijo el Consejo
Económico Asesor del primer ministro, Manmohan Singh, en un informe.
El PIB indio repuntó el 6,7 por ciento en el ejercicio 2008-2009,
que concluyó en marzo pasado, dato que reflejó ya el impacto de la
crisis global en la India después de tres años consecutivos de
crecimiento por encima del 9 por ciento.
Según las proyecciones del Consejo Económico, la agricultura,
actividad económica de la que dependen dos tercios de la población,
bajará el 2 por ciento en el actual periodo fiscal.
El sector agrícola, que aporta un 18 por ciento al PIB del
Estado, había experimentado un aumento del 1,6% en el ejercicio
fiscal 2008-2009 y del 4,9 en el anterior.
El crecimiento del PIB indio estará impulsado por la industria
(incluida la construcción), para la que el Gobierno prevé un aumento
del 8,2%, lo que implica un incremento significativo respecto a la
subida del 3,9 del pasado año fiscal.
El sector servicios, que supone algo más del 55% del PIB, se
acelerará también a un ritmo del 8,2% hasta marzo de 2010, por
debajo del 9,7% del ejercicio precedente.
"La economía india ha capeado la crisis económica bien y la India
permanece como la segunda economía de crecimiento más rápido del
mundo", dijo el presidente del Consejo, C. Rangarajan, tras entregar
su informe a Singh, según la agencia IANS.
El Consejo adujo que el déficit de lluvias del 22,7% durante el
pasado monzón en el suroeste del país lastró la actividad agrícola,
mientras que la caída de la demanda internacional y el aumento del
ahorro de las familias por la crisis internacional tuvo un impacto
negativo en las exportaciones.
Destacó el control de la inflación de los alimentos (del 33% en
el primer semestre de este ejercicio) como uno de los ámbitos de
acción política en el corto plazo, para fijar en el 6% la previsión
de inflación al cierre del ejercicio (que acumuló un 5,8% en el
primer semestre).
También señaló como prioridades a medio plazo la mejora de la
productividad agrícola, así como el desarrollo de la energía nuclear
y del gas natural para combatir el déficit energético del país. EFE