Caracas, 20 jun (EFE).- El ministro venezolano de Energía, Rafael
Ramírez, atribuyó hoy al sector privado parte de la responsabilidad
por el caso de las miles de toneladas de alimentos importados por el
Estado que se dañaron almacenados en puertos del país.
"El sector privado tiene una importante responsabilidad", declaró
Ramírez, quien preside la estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA),
a la que está adscrita la Productora y Distribuidora Venezolana de
Alimentos (PDVAL), la empresa pública que importó los alimentos.
En una entrevista con el programa dominical "José Vicente Hoy",
del ex vicepresidente del Gobierno "chavista" y periodista José
Vicente Rangel, el ministro Ramírez narró que desde la empresa
naviera que se contrata para traer los alimentos al país hasta las
almacenadoras en los puertos son "privados".
A juicio de Ramírez, "trabajar con los privados es una especie de
infierno" porque supuestamente establecen una serie de condiciones
devenidas de la "lógica capitalista" que, aseguró, dificultan el
desempeño del Estado.
Además, resaltó Ramírez, "hay una realidad: hay problemas en el
desarrollo de infraestructura de los puertos" venezolanos, que
pasaron a control estatal por decreto presidencial en marzo de 2009.
Señaló que no quería "hacer una apreciación general de los
privados" pero insistió en que la estatal tuvo que "lidiar" con
ellos "todo el 2008 y todo el 2009", los años en que permanecieron
estacionados en puertos los contenedores con los alimentos que se
habrían descompuesto durante ese lapso.
"A un privado lo puede mover un interés particular, la ganancia,
si te deja el contenedor de último en la fila ellos cobran todos los
días por eso. Si te dejan la comida en un almacén ellos cobran todos
los días por eso"", dijo Ramírez.
Añadió que el caso de los alimentos dañados indica que el Estado
venezolano "tiene que dotarse de capacidades propias necesarias para
cumplir las misiones" que tiene "que cumplir".
El escándalo de los alimentos descompuestos se destapó a finales
de mayo pasado, cuando se denunció el hallazgo de 30.000 kilos de
los mismos en contenedores almacenados en el Puerto Cabello, el
mayor del país ubicado en el estado de Carabobo (centro-norte).
Representantes opositores han denunciado en las últimas semanas
nuevos hallazgos de contenedores con alimentos dañados y que habrían
elevado la cifra hasta las 122.000 toneladas, según el ex diputado
Carlos Berrizbeitia, publicó hoy el diario El Universal de Caracas.
La oposición asegura que el caso evidenciaría el "ineficiencia y
corrupción" del Ejecutivo y pide que las investigaciones del caso no
se limiten a los funcionarios de PDVAL sino que incluya a los
ministerio de Alimentación y Energía.
La presidenta de PDVAL, Virginia Mares, dijo el pasado 9 de junio
a medios locales que los contenedores se habrían acumulado producto
de "una circunstancia en que se trajo tanta cantidad de alimentos
para enfrentar a los lacayos (opositores) que jugaron con el hambre
del pueblo (...) se nos escapó de las manos" el asunto.
El caso de los alimentos putrefactos ocurre mientras arrecia en
el país la escasez de productos básicos como leche, carne roja y
café y la inflación acumula 14,2 por ciento en los primeros cinco
meses del año.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, ha calificado de grave el
caso de los alimentos de PDVAL y ha pedido castigar a los
responsables.
El mandatario condenó que la oposición utilice el caso para
intentar desprestigiar al Gobierno y rechazó que el asunto sea un
reflejo del desempeño de PDVAL, que califica como uno de los mayores
logros de la "revolución" que lidera desde hace 11 años.
Al menos tres ex directivos de PDVAL están detenidos y enfrentan
procesos judiciales por su presunta responsabilidad en el caso de
los alimentos podridos. EFE