Madrid, 12 nov (EFE).- La anunciada unión de Iberia y British
Airways (BA) creará, cuando finalmente se produzca, una de las tres
mayores aerolíneas del mundo, ya que su facturación total alcanzará
14.000 millones de euros, cubrirá más de 200 destinos en cien países
y tendrá una flota superior a los 400 aviones.
El hecho de que la crisis golpea con fuerza a este sector por que
la facturación de estas compañías, al igual que las de "los otros
grandes" como Air France, Lufthansa, Delta Airlines y American
Airlines, fluctúe en gran medida trimestre a trimestre, al igual que
su capitalización en Bolsa.
Cuando se anunció la operación en julio de 2008 se comunicó que
se haría a través de la creación de una nueva sociedad en la que
estarán los accionistas de ambas aerolíneas, que mantendrán sus
marcas y cotizará tanto en la Bolsa de Madrid como en la de Londres.
Además, el entonces presidente de Iberia, Fernando Conte, señaló
que el proceso sería "totalmente diferente al que llevaron a cabo en
el 2004 Air France y KLM", porque aquel consistió en una ampliación
de capital de la aerolínea francesa para comprar las acciones de la
holandesa, mientras que este caso se crea "una sociedad con el
accionariado de ambas líneas aéreas".
La capitalización bursátil de British Airways es ahora
ligeramente superior a la de Iberia, ya que la empresa británica
vale en el parqué 2.700 millones de euros, mientras que la española
se sitúa en 2.116 millones.
Hace casi 16 meses, cuando se anunció la fusión, la
capitalización bursátil de British era muy superior a la de Iberia;
la empresa británica valía 9.000 millones de euros, mientras que la
española se situaba cerca de 1.800 millones.
Entonces, las compañías esperaban cerrar su proceso de fusión en
menos de un año.
El capital social de Iberia se encuentra repartido actualmente
entre Caja Madrid, que posee el 23%; British el 13,15; la Sociedad
Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) el 5,16; El Corte
Inglés, el 3,37; y el banco alemán Metzler Seel Sohn -como
depositario-, con el 2,99.
En cuanto a British Airways, en su capital se encuentran Invesco,
con el 11%; Blackrock el 9,1; Iberia con el 9,07; Standard Life, el
6,9; Barclays con el 6,9; y UBS con el 5,75.
La nueva compañía estará presente en más de cien países,
cubriendo con British Airways África, Asia, América del Norte y
Europa, y con Iberia, Latinoamérica, además del mercado europeo,
esencia en Latinoamérica.
La fusión busca crear una empresa con sinergias en muchos campos
y que permita ahorrar costes en diferentes operaciones, como la
compra de aviones y combustible.
Entre los asuntos que están frenando la consecución de la fusión
se encuentran aspectos como si la parte española va a tener más
importancia que la británica o viceversa y el plan de pensiones de
los trabajadores de la empresas británica.
Además, la crisis económica que azota al mundo se ha cebado en
especial con las compañías aéreas, de forma que el precio del
combustible y la disminución de la demanda ha mermado los ingresos.
El cierre del ejercicio del 2008 fue severo para estas
aerolíneas, pues Iberia tuvo un beneficio de 32 millones de euros,
con una caída del 90,2 por ciento con respecto al año precedente,
mientras que British registró unas pérdidas de 420 millones.
El pasado verano, Fernando Conte dejó la presidencia de Iberia
sin concluir el proceso de fusión con British y fue sustituido por
el ex presidente de Altadis Antonio Vázquez, quien se encarga de
gestionar esta operación ayudado por su experiencia en este tipo de
negociaciones.
Tanto desde Madrid como desde Londres se espera que la fusión
fructifique este año.
El Consejo de Administración de Iberia aprobó hoy el acuerdo de
intenciones sobre la fusión con BA, aunque el déficit del plan de
pensiones de la británica podría volver a frenar aún la operación.
Fuentes conocedoras de las negociaciones explicaron a Efe que
Iberia se ha reservado en dicho memorando de intenciones un derecho
de veto a la operación en el caso de que el acuerdo a que llegue BA
con sus sindicatos para financiar el plan de pensiones no sea
satisfactorio.
Si se realiza la fusión entre ambas aerolíneas será muy difícil
para Iberia "escabullirse" de la responsabilidad de financiar dicho
agujero que se eleva a más de 3.000 millones de euros.
El memorando de intenciones, que se ha ido consensuando en el
último mes y medio, contempla, asimismo, una ecuación de canje que
le da a Iberia una participación del 45% en la empresa resultante
frente al 55% de la británica. EFE